Este foro utiliza cookies
Este foro utiliza cookies para guardar tu información de inicio de sesión si estás registrado, y tu última visita si no lo estás. Las cookies son pequeños documentos de texto guardados en tu ordenador; las cookies establecidas por este foro sólo pueden ser utilizadas en este mismo sitio y no poseen riesgos de seguridad. Las cookies de este foro también llevan un registro de los temas que has leído y cuándo fue la última vez que los leíste. Los administradores NO tienen acceso a esta información, sólo TU NAVEGADOR. Por favor confirma si aceptas el establecimiento de estas cookies.

Se guardará una cookie en tu navegador sea cual sea tu elección para no tener que hacerte esta pregunta otra vez. Podrás cambiar tus ajustes sobre cookies en cualquier momento usando el link en el pie de página.
Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
#10
Kōri, aquél pilar de mármol que en silencio había permanecido desde que se habían encontrado, anunció una obviedad como una casa: la ceremonia había terminado. Pero si Kiroe no le había jugado una mala pasada, la fiesta no había hecho más que empezar.

Sin embargo, el patriarca de la familia Aotsuki había decidido que ya había terminado hacía tiempo.

¿Queeeé? ¿Pero por qué? La Arashikage-sama ha convocado una fiesta, me lo dijo mamá, ¿no váis a venir? —A pesar del miedo que le tenía a Zetsuo, el pequeño Daruu lo miraba con ojos brillantes como si le estuviera pidiendo permido para coger galletas de un tarro. En el fondo, quería pasar más tiempo con ellos. Incluso con él. Al fin y al cabo estaba cansado de estar a solas con su madre, y si su madre iba a estar ocupándose del puesto de pasteles...—. Estar sólo va a ser un rollo. ¿Ha sido por no saber como llamarle? Lo siento, no quería ofenderle...

A pesar de todo, Daruu era un crío inocente y tímido que no quería llevarse mal con nadie.

Kiroe se dio la vuelta y soltó una pequeña risilla después de revolverle el pelo a su hijo, quien se esforzó porque su quejido sonase bien alto por encima de la lluvia —Daruu odiaba que le tocasen el pelo—.

Oh, qué dirá la Arashikage, qué dirá la gente... —dejó caer la madre del chaval—. El siempre fiel y siempre cercano a la aldea Zetsuo, no acudiendo a un evento que organiza la aldea para los nuevos graduados... ¡Y encima la graduada es su hija! Nada menos que uno de los orgullos de la aldea... Dirán que no se orgullece de su familia. ¡Qué pena!

Giró la cabeza lo justo para que se pudiera observar la sonrisa maliciosa que esgrimía, sabiéndose vencedora de un pulso.

Vamos, viejo carcamal, deja que tus hijos disfruten un poco. Es una fiesta formal, no un baile de colegialas, no tienes por qué ponerte a bailar la conga. —Dos chunin que había cerca, y que de sobra conocían a Zetsuo y a su reputación, se quedaron mirando a Kiroe como si acabase de mear encima de un busto de un templo budista—. Además, —Y esto lo dijo mirando a Kori— habrá pastelillos gratis. Invita Yui-sama.

Por la cabeza de Daruu estaban circulando mil y un pensamientos. Cómo se habría tomado Zetsuo sus disculpas. Si habría hecho mucho el ridículo con Ayame. Si Kōri forzaría a su familia a asistir a la fiesta sólo por los bollitos...

Pero Zetsuo no sería capaz de saberlo nunca. Porque Kiroe tenía muchas cosas que esconder, y como toda persona que esconde cosas, sabía construir buenas puertas.

La mente de Daruu estaba cerrada desde que le habían revuelto el pelo. No duraría más que unos días, pero para Kiroe era suficiente.
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder


Mensajes en este tema
Los deseos de Ame no Kami - por Aotsuki Ayame - 29/06/2015, 00:15
Los deseos de Takaokami - por Amedama Daruu - 1/07/2015, 15:23
Los deseos de Ame no Kami - por Amedama Daruu - 23/07/2015, 19:02
RE: Los deseos de Ame no Kami - por Amedama Daruu - 26/07/2015, 02:40


This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.