29/09/2017, 16:41
— Verás, Riko-san. Puede que un lote de ceramicas no sea mucho, pero la verdad es que perder un solo lote para un mercader minorista como lo soy yo puede suponer el fin del negocio. Y ya no solo eso, los bandidos no son tontos, cuando han conseguido robarte una vez, lo volverán a hacer otra. Son como animales, si te califican de presa no te dejaran vivir hasta que se hayan comido a toda tu familia.
Riko parecía haber herido los sentimientos del mercader, que rápidamente le soltó una charla sobre lo duro que era su trabajo una vez los bandidos te anotaban en su lista de presas habituales, y en ese momento el Senju se arrepintió de sus palabras, quizás no era de mucho valor lo que transportaba, pero era su forma de ganarse la vida, por lo que perder aquello significaba mucho para él.
Fue entonces la pecosa quien tomó la palabra, deseando que no se les complicara mucho la cosa, lo cual facilitaría en cantidad que pudieran realizar su cometido sin mayor problema.
— Lo-lo siento mucho ShinFu-san, no era mi intención menospreciar en absoluto y tenga claro que, aunque no tengamos un aspecto ninjastico, podemos defendernos a nosotros, a usted y a su mercancía, no se preocupe por eso. — Aseguró el peliblanco sumamente seguro de sus palabras, tratando de trasladar esta seguridad al cliente.
Riko parecía haber herido los sentimientos del mercader, que rápidamente le soltó una charla sobre lo duro que era su trabajo una vez los bandidos te anotaban en su lista de presas habituales, y en ese momento el Senju se arrepintió de sus palabras, quizás no era de mucho valor lo que transportaba, pero era su forma de ganarse la vida, por lo que perder aquello significaba mucho para él.
Fue entonces la pecosa quien tomó la palabra, deseando que no se les complicara mucho la cosa, lo cual facilitaría en cantidad que pudieran realizar su cometido sin mayor problema.
— Lo-lo siento mucho ShinFu-san, no era mi intención menospreciar en absoluto y tenga claro que, aunque no tengamos un aspecto ninjastico, podemos defendernos a nosotros, a usted y a su mercancía, no se preocupe por eso. — Aseguró el peliblanco sumamente seguro de sus palabras, tratando de trasladar esta seguridad al cliente.
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»