3/10/2017, 18:24
El Uchiha desvió la mirada hacia el perro, sentado al lado de Nabi, pero que por alguna razón decidió alejarse justo en aquel momento. Era negro, pequeño, y lo que más destacaba de él era su ojo. Su único ojo.
—¿Invitarme?
Aquella única palabra pareció activarle como un resorte. Hay cosas que cambian… pero hay otras que nunca lo hacen. Fue entonces cuando Nabi le preguntó por el restaurante que había bajo su apartamento.
—Pues sí… sigue abierto. Aunque ahora está a cargo de la nieta. —Se hizo a un lado y le ofreció pasar—. Ponte cómodo, si quieres. Yo me pego una ducha rápido y estoy.
El apartamento de Datsue no tenía nada de especial. Una gran mesa redonda al centro, donde se acumulaban un montón de libros, libretas y folios sueltos. A la izquierda, la cocina. Al frente, un sofá junto a una ventana y un televisor, encajado en un mueble con estantería.
El Uchiha se dirigió a una puerta que había a la izquierda, que daba a la habitación, y volvió de ella con un montón de camisas sudadas cargadas al hombro, además de ropa interior en su mano. No era que Datsue durmiese sin nada encima, sino que se despertaba empapado en sudor cada poco tiempo, y tenía que ir cambiando de camisetas hasta que ya no le quedaban ninguna. Se metió en el baño —situado a la derecha de la entrada— y no volvió a salir de allí hasta pasados unos minutos.
—¡Listo! —exclamó, ahora sí vestido y debidamente arreglado: una chaqueta abierta de color carmín; una camiseta blanca debajo; y un pantalón gris, de tipo chándal. Como todavía tenía el pelo húmedo, no se lo había atado en su habitual coleta, dejándolo suelto.
—¿Invitarme?
Aquella única palabra pareció activarle como un resorte. Hay cosas que cambian… pero hay otras que nunca lo hacen. Fue entonces cuando Nabi le preguntó por el restaurante que había bajo su apartamento.
—Pues sí… sigue abierto. Aunque ahora está a cargo de la nieta. —Se hizo a un lado y le ofreció pasar—. Ponte cómodo, si quieres. Yo me pego una ducha rápido y estoy.
El apartamento de Datsue no tenía nada de especial. Una gran mesa redonda al centro, donde se acumulaban un montón de libros, libretas y folios sueltos. A la izquierda, la cocina. Al frente, un sofá junto a una ventana y un televisor, encajado en un mueble con estantería.
El Uchiha se dirigió a una puerta que había a la izquierda, que daba a la habitación, y volvió de ella con un montón de camisas sudadas cargadas al hombro, además de ropa interior en su mano. No era que Datsue durmiese sin nada encima, sino que se despertaba empapado en sudor cada poco tiempo, y tenía que ir cambiando de camisetas hasta que ya no le quedaban ninguna. Se metió en el baño —situado a la derecha de la entrada— y no volvió a salir de allí hasta pasados unos minutos.
—¡Listo! —exclamó, ahora sí vestido y debidamente arreglado: una chaqueta abierta de color carmín; una camiseta blanca debajo; y un pantalón gris, de tipo chándal. Como todavía tenía el pelo húmedo, no se lo había atado en su habitual coleta, dejándolo suelto.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado