8/10/2017, 17:43
Datsue se mesó el mentón con una mano. Huir. Eso es lo que sugería Nabi. Lo cierto era que ninguno de los Uchihas se lo había planteado —o no, al menos, él—. Había creído la versión de Zoku, y, aunque no lo hubiese hecho, no se la habría querido jugar. Por muy útil que fuese el Sunshin no Jutsu, estaban hablando de un Jounnin. No hubiese sido tan sencillo.
—Puede ser —le concedió Datsue—, pero, aunque no fuese un Inuzuka, era un Uzumaki. Sé que nunca se te dio bien el fuuinjutsu, pero ni te imaginas la de cosas que puedes hacer con eso. Alguien podría implantarte un sello invisible sin que te dieses cuenta y rastrearte a kilómetros de distancia. —No lo decía por decir. Él mismo podía hacerlo—. Pero, aunque hubiésemos logrado huir, ¿luego qué? ¿Volver a la Aldea, donde se proclamó Uzukage poco después? —Decirlo a toro pasado era muy fácil, pero a Datsue le hubiese gustado ver a todos aquellos que le criticaban qué hubiesen hecho de verdad de haber estado en su situación.
Resopló.
—En fin, sea como sea, decidimos hacerle caso. Luego, nos selló al bijuu. —El retazo de un recuerdo inundó su mente. Un sonido. Una risa escalofriante—. Creerás que me he saltado muchas cosas, pero no tanto. Básicamente, nos condujo hasta una cueva, donde allí aguardaban varios Jounnin leales a él, y cuando nos dimos cuenta de lo que iba a suceder ya era demasiado tarde. Estuvimos inconscientes por tres días, y cuando despertamos, ya estábamos en la Villa, con Zoku Uzukage y el bijuu dentro. Nos dijo que el Consejo de Sabios le habían apoyado. Que el Señor Feudal había hecho lo mismo. Que la Aldea estaba en calma, pese a que había todavía algún shinobi reticente, y nos animó a dar una vuelta.
»Lo cierto es que la Villa parecía como siempre, tranquila —prosiguió Datsue—. Fuimos a tomar algo, y allí fue cuando nos topamos con el primer… incidente —dijo, con voz misteriosa. Luego esbozó una sonrisa—. Si te pido que lo adivines me vas a soltar que nos apareció un panda rosa y nos dijo que todo era mentira, ¿verdad?
—Puede ser —le concedió Datsue—, pero, aunque no fuese un Inuzuka, era un Uzumaki. Sé que nunca se te dio bien el fuuinjutsu, pero ni te imaginas la de cosas que puedes hacer con eso. Alguien podría implantarte un sello invisible sin que te dieses cuenta y rastrearte a kilómetros de distancia. —No lo decía por decir. Él mismo podía hacerlo—. Pero, aunque hubiésemos logrado huir, ¿luego qué? ¿Volver a la Aldea, donde se proclamó Uzukage poco después? —Decirlo a toro pasado era muy fácil, pero a Datsue le hubiese gustado ver a todos aquellos que le criticaban qué hubiesen hecho de verdad de haber estado en su situación.
Resopló.
—En fin, sea como sea, decidimos hacerle caso. Luego, nos selló al bijuu. —El retazo de un recuerdo inundó su mente. Un sonido. Una risa escalofriante—. Creerás que me he saltado muchas cosas, pero no tanto. Básicamente, nos condujo hasta una cueva, donde allí aguardaban varios Jounnin leales a él, y cuando nos dimos cuenta de lo que iba a suceder ya era demasiado tarde. Estuvimos inconscientes por tres días, y cuando despertamos, ya estábamos en la Villa, con Zoku Uzukage y el bijuu dentro. Nos dijo que el Consejo de Sabios le habían apoyado. Que el Señor Feudal había hecho lo mismo. Que la Aldea estaba en calma, pese a que había todavía algún shinobi reticente, y nos animó a dar una vuelta.
»Lo cierto es que la Villa parecía como siempre, tranquila —prosiguió Datsue—. Fuimos a tomar algo, y allí fue cuando nos topamos con el primer… incidente —dijo, con voz misteriosa. Luego esbozó una sonrisa—. Si te pido que lo adivines me vas a soltar que nos apareció un panda rosa y nos dijo que todo era mentira, ¿verdad?
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado