24/10/2017, 18:44
—Pues…
¿Que qué buscaban en las Pirámides? ¿Y él qué sabía? Ella había asegurado que nadie había logrado salir con vida de allí, y ya solo por eso quería ir. Formaba parte de su naturaleza salvaje, se imaginaba. Quería demostrarle al mundo que ella era especial, que allí donde unos perecían, ella salía victoriosa. Él… Bueno, él buscaba una excusa para estar junto a ella y averiguar más sobre su inmortalidad. En la última noche había tenido una oportunidad de lujo para averiguarlo, pero la chica…
… digamos que tenía sus armas para despistar. Ahora Datsue creía haber madurado —aunque solo fuese un poquito—, lo suficiente como para tener las prioridades claras: primero su supervivencia, luego el resto. Y nada le ayudaría más a sobrevivir que ganarse la condición de inmortal. Aunque una vida eterna junto a Shukaku... No, en algún punto tendría que mirar de deshacerse de él.
—Me dijiste que no se conocía a nadie que hubiese entrado allí y vuelto con vida. Asegurabas que debía haber tesoros inconmensurables… Yo también lo creo —añadió, aunque ningún tesoro merecía la pena si no estabas vivo para disfrutar de ellos—. Pero es cierto, no es fácil dar con ellas, no aparecen en ningún mapa conocido —se inventó. No sabía si era cierto o no—. Verás… dicen que son como un espejismo —puestos a inventar, mejor hacer algo con gracia—. Cuando pareces dar con ellas, se desvanecen en el aire. Es imposible marcarlas en un punto concreto del mapa. Hay hombres que aseguran haberlas visto en un punto del desierto, y otros a millas de distancia. No sé —añadió, y aquello era lo único cierto que había dicho en un buen rato—, pero pinta emocionante, ¿no? —preguntó, esbozando una sonrisa. Por mucha memoria que hubiese perdido, el espíritu aventurero se tenía o no. Y ella había demostrado tenerlo a raudales.
¿Que qué buscaban en las Pirámides? ¿Y él qué sabía? Ella había asegurado que nadie había logrado salir con vida de allí, y ya solo por eso quería ir. Formaba parte de su naturaleza salvaje, se imaginaba. Quería demostrarle al mundo que ella era especial, que allí donde unos perecían, ella salía victoriosa. Él… Bueno, él buscaba una excusa para estar junto a ella y averiguar más sobre su inmortalidad. En la última noche había tenido una oportunidad de lujo para averiguarlo, pero la chica…
… digamos que tenía sus armas para despistar. Ahora Datsue creía haber madurado —aunque solo fuese un poquito—, lo suficiente como para tener las prioridades claras: primero su supervivencia, luego el resto. Y nada le ayudaría más a sobrevivir que ganarse la condición de inmortal. Aunque una vida eterna junto a Shukaku... No, en algún punto tendría que mirar de deshacerse de él.
—Me dijiste que no se conocía a nadie que hubiese entrado allí y vuelto con vida. Asegurabas que debía haber tesoros inconmensurables… Yo también lo creo —añadió, aunque ningún tesoro merecía la pena si no estabas vivo para disfrutar de ellos—. Pero es cierto, no es fácil dar con ellas, no aparecen en ningún mapa conocido —se inventó. No sabía si era cierto o no—. Verás… dicen que son como un espejismo —puestos a inventar, mejor hacer algo con gracia—. Cuando pareces dar con ellas, se desvanecen en el aire. Es imposible marcarlas en un punto concreto del mapa. Hay hombres que aseguran haberlas visto en un punto del desierto, y otros a millas de distancia. No sé —añadió, y aquello era lo único cierto que había dicho en un buen rato—, pero pinta emocionante, ¿no? —preguntó, esbozando una sonrisa. Por mucha memoria que hubiese perdido, el espíritu aventurero se tenía o no. Y ella había demostrado tenerlo a raudales.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado