24/10/2017, 23:28
Primero, la decepción. Luego, un rayo de esperanza. Finalmente, la pura carcajada.
—¡Esa es la Aiko que yo conocí! —exclamó, estampando la mano contra la mesa y haciendo que el vaso de agua cayese y vertiese su contenido. Para las gotas que le quedaban, no fue una gran desgracia—¡Así me gusta, joder!
Bien, ya estaba hecho. El único problema era… que se había inventado todo. Aunque ahora que lo pensaba, su plan improvisado tampoco era tan malo. Gracias a su fūinjutsu podría llevar sellado unas provisiones que ya muchos soñarían, y tampoco era mala idea lo de preguntar en Inaka, pues si había algún sitio donde supiesen el paradero de las Pirámides de Sanbei, ese debía ser aquel. «Y de camino a Inaka… la inmortalidad, si me lo monto bien. Pero tengo pensar bien cómo hacerlo...»
—Pero espera, Aiko. No nos precipitemos —dijo, siendo él esta vez el cauto—. Tengo que dar aviso en mi Aldea. No que voy a las pirámides… porque entonces no me dejan salir ni de coña. Pero esa búsqueda nos llevará su tiempo y tengo que justificar mi ausencia. Quizá lo maquille con una misión que me den fuera y le digo a mi hermano que me haga el favor de hacerla por mí. O… —se encogió de hombros—no sé, digo que se me murió mi madre y tengo que ir al entierro. En fin, algo se me ocurrirá —zanjó—. Y de paso me ocupo de la bebida. Me pasaré por Yamiria para comprar un pergamino. —Con la cantidad de agua que quería sellarse, era mejor hacerlo en papel y no en su cuerpo—. Luego, iré a Ushi. Es un pueblo del País de la Espiral dedicado a la ganadería. Esos tipos tienen tanques de agua de mil litros. Alucina. Entre una cosa y otra… creo me llevará una semana todo. Y tú mientras tanto… podrías ocuparte de la comida, ¿eh? —Sí, que por la comida había que pagar y era caro. Él, por su parte, esperaba no poner un duro. Había un ganadero que le debía un favor en Ushi… y pensaba cobrárselo.
»¿Qué me dices? ¿Nos vemos otra vez aquí, en una semana?
—¡Esa es la Aiko que yo conocí! —exclamó, estampando la mano contra la mesa y haciendo que el vaso de agua cayese y vertiese su contenido. Para las gotas que le quedaban, no fue una gran desgracia—¡Así me gusta, joder!
Bien, ya estaba hecho. El único problema era… que se había inventado todo. Aunque ahora que lo pensaba, su plan improvisado tampoco era tan malo. Gracias a su fūinjutsu podría llevar sellado unas provisiones que ya muchos soñarían, y tampoco era mala idea lo de preguntar en Inaka, pues si había algún sitio donde supiesen el paradero de las Pirámides de Sanbei, ese debía ser aquel. «Y de camino a Inaka… la inmortalidad, si me lo monto bien. Pero tengo pensar bien cómo hacerlo...»
—Pero espera, Aiko. No nos precipitemos —dijo, siendo él esta vez el cauto—. Tengo que dar aviso en mi Aldea. No que voy a las pirámides… porque entonces no me dejan salir ni de coña. Pero esa búsqueda nos llevará su tiempo y tengo que justificar mi ausencia. Quizá lo maquille con una misión que me den fuera y le digo a mi hermano que me haga el favor de hacerla por mí. O… —se encogió de hombros—no sé, digo que se me murió mi madre y tengo que ir al entierro. En fin, algo se me ocurrirá —zanjó—. Y de paso me ocupo de la bebida. Me pasaré por Yamiria para comprar un pergamino. —Con la cantidad de agua que quería sellarse, era mejor hacerlo en papel y no en su cuerpo—. Luego, iré a Ushi. Es un pueblo del País de la Espiral dedicado a la ganadería. Esos tipos tienen tanques de agua de mil litros. Alucina. Entre una cosa y otra… creo me llevará una semana todo. Y tú mientras tanto… podrías ocuparte de la comida, ¿eh? —Sí, que por la comida había que pagar y era caro. Él, por su parte, esperaba no poner un duro. Había un ganadero que le debía un favor en Ushi… y pensaba cobrárselo.
»¿Qué me dices? ¿Nos vemos otra vez aquí, en una semana?
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado