26/10/2017, 17:02
Keisuke seguía insistiendo en su idea de infiltrarse como alumnos, y Akame estaba empezando a perder la paciencia. «¿Pero cómo demonios pretende que lo hagamos? ¿Piensa que cualquiera puede entrar en una escuela así como así y ya?» Antes de que el Uchiha pudiera contestar con un comentario más afilado de lo normal, Juro intervino haciendo alarde de la inteligencia que ya había demostrado en su primer encuentro, en los Dojos.
El kusajin propuso que le siguieran con discrección, vigilándole siempre guardando las distancias y sin arriesgarse. Akame estuvo tan de acuerdo que sintió ganas de aplaudir, pero simplemente se limitó a asentir. Ahora que los primeros pasos estaban claros, el Uchiha empezó a pensar en más posibilidades... Algo menos ortodoxas.
—Estoy de acuerdo, Eikyu-san —dijo finalmente—. Conseguir información debería ser nuestra prioridad número uno. Así correremos menos riesgos y tendremos más posibilidades de acercarnos al objetivo en el momento adecuado.
Akame se mesó el mentón.
—Deberíamos averiguar donde vive. Si tiene una amante significa que hay una esposa, ¿y si habláramos con ella para intentar sacarle algo? —aventuró el uzujin—. Sin descubrirnos, claro, pero estoy seguro de que en casa del profesor debe haber más de una pista que merezca la pena investigar.
El kusajin propuso que le siguieran con discrección, vigilándole siempre guardando las distancias y sin arriesgarse. Akame estuvo tan de acuerdo que sintió ganas de aplaudir, pero simplemente se limitó a asentir. Ahora que los primeros pasos estaban claros, el Uchiha empezó a pensar en más posibilidades... Algo menos ortodoxas.
—Estoy de acuerdo, Eikyu-san —dijo finalmente—. Conseguir información debería ser nuestra prioridad número uno. Así correremos menos riesgos y tendremos más posibilidades de acercarnos al objetivo en el momento adecuado.
Akame se mesó el mentón.
—Deberíamos averiguar donde vive. Si tiene una amante significa que hay una esposa, ¿y si habláramos con ella para intentar sacarle algo? —aventuró el uzujin—. Sin descubrirnos, claro, pero estoy seguro de que en casa del profesor debe haber más de una pista que merezca la pena investigar.