28/10/2017, 19:47
Esperó una alabanza por parte del chico, algún gesto de admiración o algo parecido, sin embargo lo que escuchó la dejó un poco anonadada. Primero, porque sí había dicho algo bueno sobre ella gracias a su primera misión hecha. Segundo, porque acababa de insinuar que al pobre pájaro herido se lo había comido un perro.
—¿Pero me escuchas cuando hablo? —preguntó volviendo a fruncir el ceño —que ya comenzaba a dolerle de tanto fruncirlo en un día — y poniendo sus manos en jarra, sobre sus caderas —. Salvé a un pájaro herido y se lo entregué a su dueño, al final terminó siendo revisado por un veterinario y ya está, no tiene un final malvado —explicó para luego chasquear la lengua —¿Por qué todas las historias tienen que terminar con un perro de por medio?
»No te ofendas, Stuffy.
Terminó por cruzarse de brazos mientras caminaba. A lo lejos ya se podía vislumbrar el mar gracias a las luces de las farolas y a la de la luna que se reflejaba en el agua. Incluso la brisa marina ya llegaba hacia ellos para mecerles los cabellos.
—¿Pero me escuchas cuando hablo? —preguntó volviendo a fruncir el ceño —que ya comenzaba a dolerle de tanto fruncirlo en un día — y poniendo sus manos en jarra, sobre sus caderas —. Salvé a un pájaro herido y se lo entregué a su dueño, al final terminó siendo revisado por un veterinario y ya está, no tiene un final malvado —explicó para luego chasquear la lengua —¿Por qué todas las historias tienen que terminar con un perro de por medio?
»No te ofendas, Stuffy.
Terminó por cruzarse de brazos mientras caminaba. A lo lejos ya se podía vislumbrar el mar gracias a las luces de las farolas y a la de la luna que se reflejaba en el agua. Incluso la brisa marina ya llegaba hacia ellos para mecerles los cabellos.