11/11/2017, 11:25
(Última modificación: 11/11/2017, 11:25 por Uzumaki Eri.)
El chico contestó afirmativamente a lo que Eri había preguntado, y ella, esperanzada por encontrar algo de su talla, entró junto a él a la gran mansión. Dentro pudieron comprobar que la decoración era tan o más estravagante que lo que había visto en la fachada, fuera de la misma, con la iluminación pendiente de enormes y aparatosas lámparas y velas por todas partes, amplias salas donde predominaban los colores claros y un montón de gente en los alrededores.
La primera sala parecía ser un salón de actos, habían mesas repletas de comida y bebidas y la gente comenzaba a arremolinarse ante ellas con copas de cristal y vasos de todo tipo en sus manos.
— ¿Crees que los disfraces se recogen en algún sitio?
—Pues...
Antes de que la kunoichi pudiera si quiera seguir, una voz carraspeó desde detrás de ellos. Era un hombre mayor, parcialmente calvo y con un bigote de color blanco, vestido de mayordomo aunque con una cota de malla por encima. Le quedaba extrañamente ridículo.
—Señores, las habitaciones con armaduras se encuentran nada más salir de esta sala a la derecha, no hay pérdida —explicó con tono neutro, luego siguió repartiendo bebidas a los invitados.
—Gracias... —murmuró Eri antes de que el señor se fuese, luego se giró para mirar a Juro, con una sonrisa de oreja a oreja —. ¿Vamos?
La primera sala parecía ser un salón de actos, habían mesas repletas de comida y bebidas y la gente comenzaba a arremolinarse ante ellas con copas de cristal y vasos de todo tipo en sus manos.
— ¿Crees que los disfraces se recogen en algún sitio?
—Pues...
Antes de que la kunoichi pudiera si quiera seguir, una voz carraspeó desde detrás de ellos. Era un hombre mayor, parcialmente calvo y con un bigote de color blanco, vestido de mayordomo aunque con una cota de malla por encima. Le quedaba extrañamente ridículo.
—Señores, las habitaciones con armaduras se encuentran nada más salir de esta sala a la derecha, no hay pérdida —explicó con tono neutro, luego siguió repartiendo bebidas a los invitados.
—Gracias... —murmuró Eri antes de que el señor se fuese, luego se giró para mirar a Juro, con una sonrisa de oreja a oreja —. ¿Vamos?
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)