6/12/2017, 15:42
El tuerto se aproximó a ella, pudiendo respirar con algo más de facilidad. La mujer inquirió sobre el pergamino, a lo que Kuranosuke asintió. Sin parsimonia alguna echó mano en el interior de su abrigo, buscando aquello que se le había solicitado.
Inmediatamente después le hizo entrega del objeto en cuestión.
—Aquí tiene —le respondió con su usual aspereza.
Inmediatamente después le hizo entrega del objeto en cuestión.
—Aquí tiene —le respondió con su usual aspereza.