10/12/2017, 15:17
— Veo que no te gustan los barcos... Yo tampoco he montado nunca en uno, la verdad. Pero me gustaría. Casi no he visto mundo.
Segunda nota del día, Kusagakure no cree en los barcos y persigue a todos los astilleros que osen poner un barco sobre el agua, cuanta crueldad. Así crecen sus shinobis, sin tener ni idea de qué es el mar y luego se ahogan porque no tienen ni idea ni de nadar ni de navegar y se meten derechos a las tempestades pensando que son fuegos artificiales. Que dramático.
— Algún día podrás subirte a un barco, no te preocupes. Si hay más barcos que peces en el mar.
La cara de Juro revelaba que no estaba muy cómodo con el tema de los dinosaurios así que debía cambiar de tema o dejaría de soltarle información tan alegremente como hacía ahora. ¿Cómo se hacía eso? La facilidad de dialéctica era de gente que se dedica a mandar y a hacer el vago en compensación, eso no era para un Inuzuka, si eso para los perros de los Inuzukas, pero un Inuzuka no.
— Si... Igualmente, prefiero los bosques. Son más cómodos para mí.
A los niños de Kusagakure los obligan a vivir y jugar en un bosque hasta que es su lugar favorito en el mundo, a los que no les gusta el bosque los tiran a un enorme bosque para que se pierdan y cuando les guste los dejan volver a la villa. Desde luego, están locos estos Kuseños.
— La vegetación son la manifestación del demonio para robarnos las buenas vistas de las montañas y los lagos, además de que nos roban el agua y los minerales en su egoísta intento de sobrevivir cuando deberían arder en el infierno del que salieron.
Vaya, igual no debía plantearlo de otra forma, o no plantearlo.
Segunda nota del día, Kusagakure no cree en los barcos y persigue a todos los astilleros que osen poner un barco sobre el agua, cuanta crueldad. Así crecen sus shinobis, sin tener ni idea de qué es el mar y luego se ahogan porque no tienen ni idea ni de nadar ni de navegar y se meten derechos a las tempestades pensando que son fuegos artificiales. Que dramático.
— Algún día podrás subirte a un barco, no te preocupes. Si hay más barcos que peces en el mar.
La cara de Juro revelaba que no estaba muy cómodo con el tema de los dinosaurios así que debía cambiar de tema o dejaría de soltarle información tan alegremente como hacía ahora. ¿Cómo se hacía eso? La facilidad de dialéctica era de gente que se dedica a mandar y a hacer el vago en compensación, eso no era para un Inuzuka, si eso para los perros de los Inuzukas, pero un Inuzuka no.
— Si... Igualmente, prefiero los bosques. Son más cómodos para mí.
A los niños de Kusagakure los obligan a vivir y jugar en un bosque hasta que es su lugar favorito en el mundo, a los que no les gusta el bosque los tiran a un enorme bosque para que se pierdan y cuando les guste los dejan volver a la villa. Desde luego, están locos estos Kuseños.
— La vegetación son la manifestación del demonio para robarnos las buenas vistas de las montañas y los lagos, además de que nos roban el agua y los minerales en su egoísta intento de sobrevivir cuando deberían arder en el infierno del que salieron.
Vaya, igual no debía plantearlo de otra forma, o no plantearlo.
—Nabi—