27/12/2017, 04:35
Viendo que a Koko no le salía nada, y habiéndoselo propuesto ya anteriormente, Yume salió un momento de la celda.
—Date prisa —pidió, nada más desaparecer entre la penumbra. Koko no oyó sus pasos, por lo que, lo más probable, era que simplemente estuviese aguardando al lado de los barrotes. Volvió a entrar poco después. Miró con expresión ceñuda el cuenco y asintió, conforme. Realizó el Kage Bunshin no Jutsu, y el clon fue el encargado de llevarse el balde—. Como te iba diciendo, tengo que irme.
Introdujo la mano en un bolsillo interior de su chaqueta de cuero, y sacó una píldora de color rojo.
—No puedo asegurarte nada. Bajo mis ojos me hacen caso, pero cuando no estoy… —Yume no terminó la frase, y su silencio fue más esclarecedor que cualquier cosa que hubiese podido decir—. Esta píldora es una fuerte droga. Si la tragas, te sumergirás en un sueño. Apenas sentirás nada… Apenas recordarás nada. —Yume le abrió la boca con una mano y le tiró la píldora sobre la lengua—. Espero que no tengas necesidad de tragarla, cariño. —Por primera vez, su voz se mostró frágil, débil. Luego, como si solo hubiesen sido imaginaciones suyas, la expresión pétrea y fiera que tanto la caracterizaban volvió a instaurarse en Yume.
Cerró la puerta tras de sí, con llave, y desapareció entre la penumbra, sin despedirse. Simplemente, la abandonó.
—Date prisa —pidió, nada más desaparecer entre la penumbra. Koko no oyó sus pasos, por lo que, lo más probable, era que simplemente estuviese aguardando al lado de los barrotes. Volvió a entrar poco después. Miró con expresión ceñuda el cuenco y asintió, conforme. Realizó el Kage Bunshin no Jutsu, y el clon fue el encargado de llevarse el balde—. Como te iba diciendo, tengo que irme.
Introdujo la mano en un bolsillo interior de su chaqueta de cuero, y sacó una píldora de color rojo.
—No puedo asegurarte nada. Bajo mis ojos me hacen caso, pero cuando no estoy… —Yume no terminó la frase, y su silencio fue más esclarecedor que cualquier cosa que hubiese podido decir—. Esta píldora es una fuerte droga. Si la tragas, te sumergirás en un sueño. Apenas sentirás nada… Apenas recordarás nada. —Yume le abrió la boca con una mano y le tiró la píldora sobre la lengua—. Espero que no tengas necesidad de tragarla, cariño. —Por primera vez, su voz se mostró frágil, débil. Luego, como si solo hubiesen sido imaginaciones suyas, la expresión pétrea y fiera que tanto la caracterizaban volvió a instaurarse en Yume.
Cerró la puerta tras de sí, con llave, y desapareció entre la penumbra, sin despedirse. Simplemente, la abandonó.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado