27/12/2017, 18:08
Dime.-
Riko se colocó cerca del calvo, para así no tener que alzar la voz y evitar que oídos indiscretos escucharan lo que le tenía que decir.
— Vale, les he visto, a los dos hombres, y les he podido seguir. Creo que no me han visto... — Comenzó el peliblanco. — Han ido al cuarto piso y han llegado hasta una puerta custodiada por dos hombres con pinta peligrosa que les han dejado pasar sin problema ninguno. Esto cada vez es más raro.
El Senju comenzaba a sospechar que aquel viaje no iban a ser las vacaciones tranquilas y divertidas que le habían prometido, pero tenían que llegar al final del asunto.
Riko se colocó cerca del calvo, para así no tener que alzar la voz y evitar que oídos indiscretos escucharan lo que le tenía que decir.
— Vale, les he visto, a los dos hombres, y les he podido seguir. Creo que no me han visto... — Comenzó el peliblanco. — Han ido al cuarto piso y han llegado hasta una puerta custodiada por dos hombres con pinta peligrosa que les han dejado pasar sin problema ninguno. Esto cada vez es más raro.
El Senju comenzaba a sospechar que aquel viaje no iban a ser las vacaciones tranquilas y divertidas que le habían prometido, pero tenían que llegar al final del asunto.
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»