30/12/2017, 04:52
(Última modificación: 30/12/2017, 17:36 por Umikiba Kaido.)
Y qué cosas, sí.
Yota agudizó su oído, y logró escuchar un poco del resto de la conversación. Lo cierto es que aquel par de lugareños conversaban acerca de una supuesta expedición que nunca volvió. Para el kusajin continuó siendo un misterio el hacia dónde habían partido, y también el por qué de que no hubiesen regresado.
Aunque, entre dimes y diretes, hubo algo que, quizás, pudo llamar su atención. Aún más.
—Mira tú, que está bien adentrarse hasta los caminos asegurados del valle, pero ir más allá... a las llamadas tierras de nadie. ¿Tienes que estar un poco loco, no?
Yota agudizó su oído, y logró escuchar un poco del resto de la conversación. Lo cierto es que aquel par de lugareños conversaban acerca de una supuesta expedición que nunca volvió. Para el kusajin continuó siendo un misterio el hacia dónde habían partido, y también el por qué de que no hubiesen regresado.
Aunque, entre dimes y diretes, hubo algo que, quizás, pudo llamar su atención. Aún más.
—Mira tú, que está bien adentrarse hasta los caminos asegurados del valle, pero ir más allá... a las llamadas tierras de nadie. ¿Tienes que estar un poco loco, no?