9/01/2018, 00:10
Con un poco de la ayuda de Juro, ambos salimos ilesos de una posible reprimenda por parte de Akame, su rostro no se mostró muy agraciado cuando se enteró que realmente no teníamos nada... Es por eso que no tardó en mencionar por dónde es que se marchó la pareja de tórtolos enamorados.
—Esperemos sea así.— Respondí a Uchiha mientras retomaba la caminata por la calle indicada.
Esta vez la persecución la haríamos los tres, aparentemente, lo cierto es que permití que el shinobi de Uzushiogakure se mantuviese a la cabeza, después de todo parecía hacerlo todo muy bien y sí él metía la pata tendría parte de la culpa del día de hoy, sí es que no lográbamos conseguir nada para el final del día...
Tras unos cuantos minutos de seguir los pasos del pelinegro, llegamos a una calle ciega, y lo bueno era que el poseedor del sharingan había tenido un poco de razón, bueno toda la razón; fue inevitable sonreír cuando leí el letrero que identificaba el lugar como un hostal, ¿realmente se quedarían a dormir?
—Que boca la tuya...— Emití para nuestro clarividente.
—¿Tienes alguna buena idea en mente? Será difícil no armar un escándalo ahí dentro...— Finalicé y luego miré a Juro, él podría tener una buena idea también, mientras tanto me mantuve en silencio pensando para planear o añadir a la idea de mis compañeros.
—Esperemos sea así.— Respondí a Uchiha mientras retomaba la caminata por la calle indicada.
Esta vez la persecución la haríamos los tres, aparentemente, lo cierto es que permití que el shinobi de Uzushiogakure se mantuviese a la cabeza, después de todo parecía hacerlo todo muy bien y sí él metía la pata tendría parte de la culpa del día de hoy, sí es que no lográbamos conseguir nada para el final del día...
Tras unos cuantos minutos de seguir los pasos del pelinegro, llegamos a una calle ciega, y lo bueno era que el poseedor del sharingan había tenido un poco de razón, bueno toda la razón; fue inevitable sonreír cuando leí el letrero que identificaba el lugar como un hostal, ¿realmente se quedarían a dormir?
—Que boca la tuya...— Emití para nuestro clarividente.
—¿Tienes alguna buena idea en mente? Será difícil no armar un escándalo ahí dentro...— Finalicé y luego miré a Juro, él podría tener una buena idea también, mientras tanto me mantuve en silencio pensando para planear o añadir a la idea de mis compañeros.