13/01/2018, 23:19
—No quería hacer ésto a Yogaru-sama, no quería. Pero lo que me ofrecieron... lo que me ofrecieron, Reiji-kun, ni tú mismo lo rechazarías. Pensé, realmente pensé que si las sospechas no recaían sobre mi aún y habiendo ultrajado el pergamino familiar de los Riya, aún podría continuar trabajando para él. Porque le estoy muy agradecido. ¡¿A quién le podía hacer daño que un pedazo de papel desapareciera, cierto?!
—Tus excusas no sirven conmigo, Mirogata. —Dije mientras caminaba tras él y le apuntaba con el kunai. —Conozco a un chico que no tiene nada, apenas puede comer todos los días, tiene que pagar la medicina de su madre, que está en cama sin poder moverse y su padre murió hace muchos años ¿Sabes lo que hace él? Trabaja. No le roba a nadie.
—Además, iba a ser vendida a un emisario de las tierras lejanas del País del Agua. No nos iba a afectar en nada. Pensé... que no haría daño a nadie. ¡Pero tú, tuviste que meter las narices! ¡vi que no me descartabas de sospechoso, y tuve, ... tuve que usar el plan b. Y... la embarré más.
—¿No iba a hacerle daño a nadie? No te creo Mirogata.
No, toda esa sarta de palabrería que estaba diciendo no tenía ningún sentido. Si hubiera querido hacer eso que decía, Yogaru ni se habría enterado, no tendría por qué estar sufriendo. No, había ido a hacerle daño a Yogaru.
—Te sabes la receta de memoria, podrías haberla escrito en otro pergamino, sois los únicos que lo han visto, nadie hubiese sabido si era tu letra o la Yogaru, nadie se habría enterado, nunca. Sin embargo la robaste, porque sabias que su desaparición le haría daño a su dueño. Dime la verdad. Y empieza diciéndome quién te pidió que lo hicieras y quienes eran tus complices.
—Tus excusas no sirven conmigo, Mirogata. —Dije mientras caminaba tras él y le apuntaba con el kunai. —Conozco a un chico que no tiene nada, apenas puede comer todos los días, tiene que pagar la medicina de su madre, que está en cama sin poder moverse y su padre murió hace muchos años ¿Sabes lo que hace él? Trabaja. No le roba a nadie.
—Además, iba a ser vendida a un emisario de las tierras lejanas del País del Agua. No nos iba a afectar en nada. Pensé... que no haría daño a nadie. ¡Pero tú, tuviste que meter las narices! ¡vi que no me descartabas de sospechoso, y tuve, ... tuve que usar el plan b. Y... la embarré más.
—¿No iba a hacerle daño a nadie? No te creo Mirogata.
No, toda esa sarta de palabrería que estaba diciendo no tenía ningún sentido. Si hubiera querido hacer eso que decía, Yogaru ni se habría enterado, no tendría por qué estar sufriendo. No, había ido a hacerle daño a Yogaru.
—Te sabes la receta de memoria, podrías haberla escrito en otro pergamino, sois los únicos que lo han visto, nadie hubiese sabido si era tu letra o la Yogaru, nadie se habría enterado, nunca. Sin embargo la robaste, porque sabias que su desaparición le haría daño a su dueño. Dime la verdad. Y empieza diciéndome quién te pidió que lo hicieras y quienes eran tus complices.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)