16/01/2018, 21:06
La muchacha miró a ambos. Escuchó con atención primero al calvo, tras el silencio a su compañero. Se rascó la cabeza nuevamente y un eeehh... leve se pudo escuchar. Estaba claro que pensaba muy bien las palabras que usaría, pero de lo que no estaba segura era si decirlas o no.
Esto de los viajes es nuestro trabajo.- lanzó un pequeño suspiro de cansancio.
El capitán y yo somos casados, este barco era de mi suegro y nosotros nos encargamos de montar todo y contratar a la tripulación. Ahora, por..... por cosas- resumió- Estos hombres vienen aquí a matar a mi esposo. ¡Y NO LO VOY A PERMITIR!
La respuesta era corta: matarlos. Al menos eso sería para cualquiera, pero al calvo ni se le cruzo por la cabeza. ¿Por qué aceptarlos? ¿Por qué no echarlos del barco? Las preguntas eran varias pero recordó que todavía le faltaba por hablar.
No sé porque los conocen. Tal vez los investigaron, tal vez saben que son shinobi y que podrían interponerse en su camino. No lo sé, quiero hacer algo pero a la vez no quiero arruinar la imagen que nos costó tanto crear.
La muchacha lanzó sus últimas palabras de manera quebradiza y al poco tiempo se encontraba con las manos en la cara, derramando lágrimas sentada en la cama del uzujin. Daba pena, incluso bronca ante esos hombres, pero la solución no era llorar. Si le molestaba tenían que hacer algo, al menos saber que era lo que tramaban.
Esto de los viajes es nuestro trabajo.- lanzó un pequeño suspiro de cansancio.
El capitán y yo somos casados, este barco era de mi suegro y nosotros nos encargamos de montar todo y contratar a la tripulación. Ahora, por..... por cosas- resumió- Estos hombres vienen aquí a matar a mi esposo. ¡Y NO LO VOY A PERMITIR!
La respuesta era corta: matarlos. Al menos eso sería para cualquiera, pero al calvo ni se le cruzo por la cabeza. ¿Por qué aceptarlos? ¿Por qué no echarlos del barco? Las preguntas eran varias pero recordó que todavía le faltaba por hablar.
No sé porque los conocen. Tal vez los investigaron, tal vez saben que son shinobi y que podrían interponerse en su camino. No lo sé, quiero hacer algo pero a la vez no quiero arruinar la imagen que nos costó tanto crear.
La muchacha lanzó sus últimas palabras de manera quebradiza y al poco tiempo se encontraba con las manos en la cara, derramando lágrimas sentada en la cama del uzujin. Daba pena, incluso bronca ante esos hombres, pero la solución no era llorar. Si le molestaba tenían que hacer algo, al menos saber que era lo que tramaban.
"El miedo es el camino al lado oscuro. El miedo lleva a la ira, la ira al odio, el odio al sufrimiento, y el sufrimiento al lado oscuro"
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘