24/01/2018, 22:44
Akame le propinó un puñetazo mientras ejecutaba su estrategia. Casi logró desestabilizarle, pero Juro sabía bien que todo dependía de él en ese momento.
Y por una vez, no la fastidió.
El primer frasco acertó junto al hilo de chakra, que se volvió inútil tras paralizar a Akame. El segundo, también acertó. Juro había barajado la posibilidad de que Keisuke le interceptase, pero afortunadamente, no tuvo que llegar a eso.
El academico chilló cuando el veneno le alcanzó también a él. Pero a Juro le dio francamente igual. Él les había metido en eso.
Sin embargo, si que sintió algo de satisfacción cuando aquella mujer comenzó a rascarse los brazos con desesperación. De pronto, sus compañeros parecían ser libres. Juro sonrió con satisfacción.
—¡Niñato entrometido! ¿Cómo te atreves a dañar mi suave piel de esta forma?¡Te arrepentirás! ¡Te lo juro por Snoopy!
A pesar del tono infantil, sintió algo de miedo. No tenía ninguna oportunidad contra ella si se recuperaba. Sin embargo, ahora, estaba distraida por el veneno. Si tan solo pudiese sacar a su marioneta...
« Centrate en tus compañeros. Uno esta en shock y otro paralizado »
Antes de poder hacer mucho, la mujer utilizó el sello del tigre y desapareció.
Juro no pudo evitar soltar un suspiro de alivio. Había conseguido aguantar la situación. Al menos, de momento. Rapidamente, se acercó a Akame, paralizado.
— Akame-san, ¿estas bien? ¿os sentis bien? ¿sois vosotros? — dijo, mirando también a Keisuke, quien se encontraba al otro lado de la sala —. Oye... siento lo del veneno. No quería hacerlo. Pero pensé que era más eficiente que golpearte. Si me hubieses derrotado por tener piedad, todo se habría acabado.
Estuvo a punto de explicarle que no tenía ninguna clase de antídoto, pero Keisuke, quien parecía estar mucho mejor, se acercó a él y se lo inyectó.
— ¡Genial, Keisuke! ¡Me alegro de tenerte como compañero! — exclamó, lleno de felicidad por ver que al menos su compañero estaría bien. Luego, se acercó al académico, quien también estaba afectado —. Esto... disculpe por lo del veneno. Era una situación de vida o muerte y usted estaba en medio. Tampoco tengo un antídoto para ese, lo lamento. En cuestión de unos minutos se le pasará, no se preocupe.
Le hubiese gustado ayudarle, pero no tenía forma. Era un poco irresponsable ir por ahí con venenos sin ningun tipo de antídoto por la vida, ya lo sabía, pero los ryos no llegaban a veces.
Y por una vez, no la fastidió.
El primer frasco acertó junto al hilo de chakra, que se volvió inútil tras paralizar a Akame. El segundo, también acertó. Juro había barajado la posibilidad de que Keisuke le interceptase, pero afortunadamente, no tuvo que llegar a eso.
El academico chilló cuando el veneno le alcanzó también a él. Pero a Juro le dio francamente igual. Él les había metido en eso.
Sin embargo, si que sintió algo de satisfacción cuando aquella mujer comenzó a rascarse los brazos con desesperación. De pronto, sus compañeros parecían ser libres. Juro sonrió con satisfacción.
—¡Niñato entrometido! ¿Cómo te atreves a dañar mi suave piel de esta forma?¡Te arrepentirás! ¡Te lo juro por Snoopy!
A pesar del tono infantil, sintió algo de miedo. No tenía ninguna oportunidad contra ella si se recuperaba. Sin embargo, ahora, estaba distraida por el veneno. Si tan solo pudiese sacar a su marioneta...
« Centrate en tus compañeros. Uno esta en shock y otro paralizado »
Antes de poder hacer mucho, la mujer utilizó el sello del tigre y desapareció.
Juro no pudo evitar soltar un suspiro de alivio. Había conseguido aguantar la situación. Al menos, de momento. Rapidamente, se acercó a Akame, paralizado.
— Akame-san, ¿estas bien? ¿os sentis bien? ¿sois vosotros? — dijo, mirando también a Keisuke, quien se encontraba al otro lado de la sala —. Oye... siento lo del veneno. No quería hacerlo. Pero pensé que era más eficiente que golpearte. Si me hubieses derrotado por tener piedad, todo se habría acabado.
Estuvo a punto de explicarle que no tenía ninguna clase de antídoto, pero Keisuke, quien parecía estar mucho mejor, se acercó a él y se lo inyectó.
— ¡Genial, Keisuke! ¡Me alegro de tenerte como compañero! — exclamó, lleno de felicidad por ver que al menos su compañero estaría bien. Luego, se acercó al académico, quien también estaba afectado —. Esto... disculpe por lo del veneno. Era una situación de vida o muerte y usted estaba en medio. Tampoco tengo un antídoto para ese, lo lamento. En cuestión de unos minutos se le pasará, no se preocupe.
Le hubiese gustado ayudarle, pero no tenía forma. Era un poco irresponsable ir por ahí con venenos sin ningun tipo de antídoto por la vida, ya lo sabía, pero los ryos no llegaban a veces.
Hablo / Pienso
Avatar hecho por la increible Eri-sama.
...
Sellos implantados: Hermandad intrepida
- Juro y Datsue : Aliento nevado, 218. Poder:60