26/01/2018, 13:09
—¿A quién no le apetece una buena pizza? —dijo Kaido, visiblemente nervioso ahora. Se terminó el brebaje de un sorbo y chocó la jarra contra la mesa. Afortunadamente, Daruu ya había empezado cuando Kaido entró a Los kunai cruzados, de modo que no tuvo que hacer ninguna locura como tal, y se limitó a beber el último sorbo de hidromiel pluvial—. ésta vez con anchoa, por favor.
—¡No caerá esa breva amigo! —rio Daruu—. Pídetela tú con anchoa si quieres, pero yo me pido otra aparte.
Los dos genin se levantaron como un rayo. Daruu cogió su capa impermeable y se la echó por encima. Tras despedirse del dueño con un leve ademán con la cabeza, salió por la puerta junto a su amigo pez.
—Bien. En Yukio debe de hacer un frío del carajo por estas fechas, y a Hibagon le gustan las montañas —dijo, abandonando totalmente el tono de camaradería falsa que habían mostrado dentro del local—, de modo que sería bueno que cogiéramos la ropa de invierno más abrigada que encontrásemos, y suministros para el viaje. Agua, comida...
»Yukio está a más de un día y medio de camino. Puedo acortar un poco el viaje con mis pájaros de caramelo, pero aún así... Tendremos que parar a descansar antes. Quizás en la Ciudad Fantasma, si no eres supersticioso. Seguro que hay algún techo estable donde resguardarse de la tormenta.
—¡No caerá esa breva amigo! —rio Daruu—. Pídetela tú con anchoa si quieres, pero yo me pido otra aparte.
Los dos genin se levantaron como un rayo. Daruu cogió su capa impermeable y se la echó por encima. Tras despedirse del dueño con un leve ademán con la cabeza, salió por la puerta junto a su amigo pez.
—Bien. En Yukio debe de hacer un frío del carajo por estas fechas, y a Hibagon le gustan las montañas —dijo, abandonando totalmente el tono de camaradería falsa que habían mostrado dentro del local—, de modo que sería bueno que cogiéramos la ropa de invierno más abrigada que encontrásemos, y suministros para el viaje. Agua, comida...
»Yukio está a más de un día y medio de camino. Puedo acortar un poco el viaje con mis pájaros de caramelo, pero aún así... Tendremos que parar a descansar antes. Quizás en la Ciudad Fantasma, si no eres supersticioso. Seguro que hay algún techo estable donde resguardarse de la tormenta.