28/01/2018, 17:39
— Joisjois, una parejita de jóvenes que viene a tener una comida romántica...
Eri se sorprendió al recibir tal trato, y rápidamente corrió a corregir al peticionario, o a algún empleado que tuviese allí contratado.
—No, señor, nosotr-
— Pasad al fondo, hijos, y no os preocupéis por el chucho, que podéis pasarlo con vosotros tambien, en Fideos Aikito no discriminamos por raza, pero si se mea lo fregáis vosotros.
—Discúlpenos, señor —paró de golpe la kunoichi, posando ambas manos sobre sus caderas y con un semblante serio surcando su rostro —. Somos los shinobi que pidió que acudieran a su recinto para ayudarle, mi nombre es Uzumaki Eri, y mi compañero es Inuzuka Nabi —explicó, relajando el rostro poco a poco hasta que dejó caer ambos brazos a los lados de su cuerpo.
»Estamos a su completo servicio.
Esperaba que con aquellas palabras quedase claro que eran ninjas y no clientes, sobre todo teniendo en cuenta que stuffy era un perro ninja que también estaba dispuesto a ayudar en la misión, o eso era lo que esperaba del can.
Eri se sorprendió al recibir tal trato, y rápidamente corrió a corregir al peticionario, o a algún empleado que tuviese allí contratado.
—No, señor, nosotr-
— Pasad al fondo, hijos, y no os preocupéis por el chucho, que podéis pasarlo con vosotros tambien, en Fideos Aikito no discriminamos por raza, pero si se mea lo fregáis vosotros.
—Discúlpenos, señor —paró de golpe la kunoichi, posando ambas manos sobre sus caderas y con un semblante serio surcando su rostro —. Somos los shinobi que pidió que acudieran a su recinto para ayudarle, mi nombre es Uzumaki Eri, y mi compañero es Inuzuka Nabi —explicó, relajando el rostro poco a poco hasta que dejó caer ambos brazos a los lados de su cuerpo.
»Estamos a su completo servicio.
Esperaba que con aquellas palabras quedase claro que eran ninjas y no clientes, sobre todo teniendo en cuenta que stuffy era un perro ninja que también estaba dispuesto a ayudar en la misión, o eso era lo que esperaba del can.