1/02/2018, 03:08
El muchacho parecía renuente a aceptar la realidad. A comprender las consecuencias que podrían acaecer durante un viaje a tierras lo suficientemente inexploradas como para considerarse peligrosas. Hibana negó con la cabeza, un par de veces.
—No lo sé. Soy crítico con lo que veo: un terreno poco uniforme y rutas apenas transitadas, y por tanto peligrosas. Si somos un poco menos objetivos y le damos rienda a la imaginación, Unraikyo podría ocultar mil cosas. O quizás, nada. Espero tu optimismo sea acertado y que nuestro viaje transcurra sin ningún inconveniente.
Luego, increpó acerca de la pequeña muestra que le había mencionado antes. El doctor sonrió, a medida de que se alejaba de los linderos del mapa.
—Paciencia. Él anunciará su llegada. Lo importante ahora es que te prepares para mañana y que descanses, si lo necesitas. No me puedo permitir una guardia personal que no esté en todos sus cabales, ¿no? —miró el reloj, marcaban las siete—. he rentado la habitación de en frente para ti. Ve, duerme un poco y nos encontramos aquí mañana.
—No lo sé. Soy crítico con lo que veo: un terreno poco uniforme y rutas apenas transitadas, y por tanto peligrosas. Si somos un poco menos objetivos y le damos rienda a la imaginación, Unraikyo podría ocultar mil cosas. O quizás, nada. Espero tu optimismo sea acertado y que nuestro viaje transcurra sin ningún inconveniente.
Luego, increpó acerca de la pequeña muestra que le había mencionado antes. El doctor sonrió, a medida de que se alejaba de los linderos del mapa.
—Paciencia. Él anunciará su llegada. Lo importante ahora es que te prepares para mañana y que descanses, si lo necesitas. No me puedo permitir una guardia personal que no esté en todos sus cabales, ¿no? —miró el reloj, marcaban las siete—. he rentado la habitación de en frente para ti. Ve, duerme un poco y nos encontramos aquí mañana.