5/02/2018, 03:07
"Lo tenemos" Canté victorioso al ver a nuestro objetivo acorralado contra nuestras poderosas ofensivas, levanté el puño en alto y con cierto orgullo por aquella hazaña, ahora empezaba a creer que el viejo Sarutobi se habia equivocado y que posiblemente sí tendríamos oportunidad, por lo que lancé mi ataqué con una sonrisa.
Sonrisa que se transformó en un ceño fruncido cuando mis nudillos chocaron contra el escudo de hielo, el mismo se resquebrajó y fue suficiente para que mi cuerpo se viese impulsado a unos cuantos metros hacia atrás, con la consiguiente desaparición de mis falsos cuerpos en una ligera cortina de humo.
—Rayos... No salió como esperaba.— Admití adolorido, era la segunda o tercera vez, o no sabía cual de todas las veces que estaba contra el suelo, para mi fortuna o desgracia la nieve amortiguaba mi caída, pero el frío cada vez era peor, incluso empezaba a ver como mis manos palidecían y dolía por las bajas temperaturas.
Con un poco de dificultad y cansansio me puse nuevamente de pie, ¿cuánto tiempo podríamos hacerle frente a aquella bestia de chakra? ¿Acaso su aguante había mejorado? ¿Tenía más chakra del que pensaba? Ciento un dudas recorrieron mi mente, y todo parecía empeorar cuando vi que sus palmas buscaban el suelo.
"Genial... ¿Ahora que?" Pensé resignado, seguramente este sería otro de sus ataques, ¿volvería a crear las bestias gélidas y comenzaría la cacería?
El suelo empezó a temblar y mis pies comenzaron a moverse, no quería quedarme como un espectador esperando el golpe, aunque que me desplazase no haría mucha diferencia, cientos de pilares de hielo concreto empezaron a subir rápidamente, pude esquivar un par de ellos, pero inevitablemente uno me golpeo de lleno, no podía evadirlos todos y todo mi sintió la embestida de aquella columna.
—Coff coff.— Tosí violentamente por el golpe, la columna me había dado justo en el pecho y mi respiración se había cortado por unos segundos, mi corazón latía ahora más violentamente y mi cuerpo parecía no querer seguir luchando, por lo menos sin un descanso...
Sonrisa que se transformó en un ceño fruncido cuando mis nudillos chocaron contra el escudo de hielo, el mismo se resquebrajó y fue suficiente para que mi cuerpo se viese impulsado a unos cuantos metros hacia atrás, con la consiguiente desaparición de mis falsos cuerpos en una ligera cortina de humo.
—Rayos... No salió como esperaba.— Admití adolorido, era la segunda o tercera vez, o no sabía cual de todas las veces que estaba contra el suelo, para mi fortuna o desgracia la nieve amortiguaba mi caída, pero el frío cada vez era peor, incluso empezaba a ver como mis manos palidecían y dolía por las bajas temperaturas.
Con un poco de dificultad y cansansio me puse nuevamente de pie, ¿cuánto tiempo podríamos hacerle frente a aquella bestia de chakra? ¿Acaso su aguante había mejorado? ¿Tenía más chakra del que pensaba? Ciento un dudas recorrieron mi mente, y todo parecía empeorar cuando vi que sus palmas buscaban el suelo.
"Genial... ¿Ahora que?" Pensé resignado, seguramente este sería otro de sus ataques, ¿volvería a crear las bestias gélidas y comenzaría la cacería?
El suelo empezó a temblar y mis pies comenzaron a moverse, no quería quedarme como un espectador esperando el golpe, aunque que me desplazase no haría mucha diferencia, cientos de pilares de hielo concreto empezaron a subir rápidamente, pude esquivar un par de ellos, pero inevitablemente uno me golpeo de lleno, no podía evadirlos todos y todo mi sintió la embestida de aquella columna.
—Coff coff.— Tosí violentamente por el golpe, la columna me había dado justo en el pecho y mi respiración se había cortado por unos segundos, mi corazón latía ahora más violentamente y mi cuerpo parecía no querer seguir luchando, por lo menos sin un descanso...