10/02/2018, 20:44
Seguí de cerca los pasos del moreno hasta llegar al hogar de Sarutobi, en unos pocos segundos me encontré a la par del mismo, imité su acción al mirar el bosque de hielo y entonces pude notar la presencia del Seltkalt, se estaba preparando para venir a acecharnos, incluso las ráfagas a su alrededor era signo de que venía con todo.
Koutetsu me lanzó una mirada directa, y empezó a hacer sellos, ¿quería hacer una finta? No, o sea sí, pero era algo más, conocía aquella secuencia de sellos y alarmado empecé a realizar la misma en vista de que él ya había comenzado, la imagen de nuestro agresor se acercó en un abrir y cerrar de ojos y arremetió de lleno contra nosotros, en ambas manos tenía sendas cuchillas de cristal, lanzó varios cortes a mi cuerpo y la farsa se vio, detrás de una cortina de humo se vio una caja de madera, de aquellas en las que el anciano guardaba sus artículos.
Koutetsu utilizó aquella treta como distracción para dar un contraataque directo hacia él, deslizó su sable de un lado a otro, justo iba a acercarme para dar apoyo físico y moral, pero entonces escuché la voz del guardián del conocimineot.
—¡Deben abandonar el ático o quedaran atrapados! — Anunció
"Rayos!! Espero que sirva..."
—Cuidado!—Nuevamente uní mis manos, entrelazandolas haciendo un par de posición de manos y en cuestión de milisegundos. —Suiton: Mizuame Nabara!!— Escupí un chorro líquido viscoso directamente hacia el guerrero, con la esperanza de hacerle caer en la misma técnica que había servido en aquella oportunidad.
—Salgamos de aquí!— Exigí al peliblanco mientras me acercaba al lugar en donde una vez hubo una ventana. —No hay tiempo que perder!—
Koutetsu me lanzó una mirada directa, y empezó a hacer sellos, ¿quería hacer una finta? No, o sea sí, pero era algo más, conocía aquella secuencia de sellos y alarmado empecé a realizar la misma en vista de que él ya había comenzado, la imagen de nuestro agresor se acercó en un abrir y cerrar de ojos y arremetió de lleno contra nosotros, en ambas manos tenía sendas cuchillas de cristal, lanzó varios cortes a mi cuerpo y la farsa se vio, detrás de una cortina de humo se vio una caja de madera, de aquellas en las que el anciano guardaba sus artículos.
Koutetsu utilizó aquella treta como distracción para dar un contraataque directo hacia él, deslizó su sable de un lado a otro, justo iba a acercarme para dar apoyo físico y moral, pero entonces escuché la voz del guardián del conocimineot.
—¡Deben abandonar el ático o quedaran atrapados! — Anunció
"Rayos!! Espero que sirva..."
—Cuidado!—Nuevamente uní mis manos, entrelazandolas haciendo un par de posición de manos y en cuestión de milisegundos. —Suiton: Mizuame Nabara!!— Escupí un chorro líquido viscoso directamente hacia el guerrero, con la esperanza de hacerle caer en la misma técnica que había servido en aquella oportunidad.
—Salgamos de aquí!— Exigí al peliblanco mientras me acercaba al lugar en donde una vez hubo una ventana. —No hay tiempo que perder!—