11/03/2018, 13:54
—¿Y con qué dinero piensas costearte esa posada y esas frutas sin pelo? Nos quitaron todo en aquella celda, ¿recuerdas? ¿O es que guardas la pasta en los calzones?
Daruu soltó una risotada, entre divertida y parecida a la que podría tener un demente. Se dio la vuelta y caminó hasta una piedra grande cercana. Se dejó caer en la arena y se sentó a "degustar" el resto de su mitad del coco.
—Datsue, amigo mío, deja que te cuenta una historia... —empezó, pero el ribereño siguió hablando.
—Hagamos una cosa —le propuso—. Dame hasta el anochecer, ¿vale? Solo hasta el anochecer. Si no encontramos el tesoro, yo seré el primero en subirme en uno de esos pájaros tuyos y volver a Oonindo. Iremos a la Ribera del Norte. Conozco a alguien que nos dará de comer y una cama calentita sin cobrarnos. ¿Trato?
...un día, dos uzureños, uno de ellos bastante feo y con la nariz torcida, qué feo que era el hijoputa, me persiguieron por la mitad de Oonindo, hasta casi el Valle del Fin, desde un pueblo cercano al cráter de la antigua Konohagakure. ¿Sabes por donde queda, verdad? Tampoco llevaba dinero ni provisiones encima, y sin embargo, conseguí volver a casa sano y salvo, y le torcí un poco más la nariz a dicho uzureño, todo sea dicho.
Balanceló el medio coco en la mano derecha y lo arrojó por detrás y por encima de la roca.
—Pero bueno. Está bien. Hasta el anochecer. Y LUEGO me iré. Contigo... o sin ti.
Daruu soltó una risotada, entre divertida y parecida a la que podría tener un demente. Se dio la vuelta y caminó hasta una piedra grande cercana. Se dejó caer en la arena y se sentó a "degustar" el resto de su mitad del coco.
—Datsue, amigo mío, deja que te cuenta una historia... —empezó, pero el ribereño siguió hablando.
—Hagamos una cosa —le propuso—. Dame hasta el anochecer, ¿vale? Solo hasta el anochecer. Si no encontramos el tesoro, yo seré el primero en subirme en uno de esos pájaros tuyos y volver a Oonindo. Iremos a la Ribera del Norte. Conozco a alguien que nos dará de comer y una cama calentita sin cobrarnos. ¿Trato?
...un día, dos uzureños, uno de ellos bastante feo y con la nariz torcida, qué feo que era el hijoputa, me persiguieron por la mitad de Oonindo, hasta casi el Valle del Fin, desde un pueblo cercano al cráter de la antigua Konohagakure. ¿Sabes por donde queda, verdad? Tampoco llevaba dinero ni provisiones encima, y sin embargo, conseguí volver a casa sano y salvo, y le torcí un poco más la nariz a dicho uzureño, todo sea dicho.
Balanceló el medio coco en la mano derecha y lo arrojó por detrás y por encima de la roca.
—Pero bueno. Está bien. Hasta el anochecer. Y LUEGO me iré. Contigo... o sin ti.
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)