20/08/2015, 19:10
La chica atendió obedientemente a lo que Nabi le estaba contando, tras finalizar, esta hizo un ademán con la cabeza que más tarde aclararia al muchacho que era porque le estaba diciendo de ir aquel mismo dia. La verdad era que el rubio no tenia nada que hacer aquel dia, habia tenido un par de dias ajetreados pero justo ese no tenia nada que hacer, así que porqué no. Despues la peliazul dijo que así tendria una excusa para estar con él.
Eri-chan, somos amigos, si quieres estar conmigo aqui estoy. Sobretodo si es para ir a sitios interesantes.
La gennin se levantó a llevar los platos a la cocina, y el Uchiha se fue a su cuarto a prepararse, apenas un par de minutos despues saldria con su indumentaria habitual y su equipamiento ninja. Se encontró con Eri ofreciendole comida gratis por acompañarla así como su mano para salir. Pero Nabi, más corto que el pene de un piojo le chocó los cinco y pasó hacia la puerta. Donde esperaria pacientemente a su acompañante para cerrar la puerta.
Al salir se daria cuenta de que la mañana se estaba empezando a nublar, y tenia toda la pinta de que lloveria, se giró al momento para advertirselo a la pequeña Eri.
Eri-chan, probablemente lloverá. ¿Quieres seguir con el plan? En el baño tengo un paraguas si lo necesitas.
El paraguas se encontraba en el plato de ducha porque hacía un par de dias habia tenido que ir a llevar unos papeles a la academia y llovia, era normal en esa epoca del año, lo raro era que él llevara paraguas. No le molestaba la lluvia aunque por su naturaleza elemental se pudiera pensar lo contrario. Se habia pasado demasiados años sin ver esa magica escena del agua cayendo del cielo y sentirla en su piel le hacia sentir bien, libre.
Eri-chan, somos amigos, si quieres estar conmigo aqui estoy. Sobretodo si es para ir a sitios interesantes.
La gennin se levantó a llevar los platos a la cocina, y el Uchiha se fue a su cuarto a prepararse, apenas un par de minutos despues saldria con su indumentaria habitual y su equipamiento ninja. Se encontró con Eri ofreciendole comida gratis por acompañarla así como su mano para salir. Pero Nabi, más corto que el pene de un piojo le chocó los cinco y pasó hacia la puerta. Donde esperaria pacientemente a su acompañante para cerrar la puerta.
Al salir se daria cuenta de que la mañana se estaba empezando a nublar, y tenia toda la pinta de que lloveria, se giró al momento para advertirselo a la pequeña Eri.
Eri-chan, probablemente lloverá. ¿Quieres seguir con el plan? En el baño tengo un paraguas si lo necesitas.
El paraguas se encontraba en el plato de ducha porque hacía un par de dias habia tenido que ir a llevar unos papeles a la academia y llovia, era normal en esa epoca del año, lo raro era que él llevara paraguas. No le molestaba la lluvia aunque por su naturaleza elemental se pudiera pensar lo contrario. Se habia pasado demasiados años sin ver esa magica escena del agua cayendo del cielo y sentirla en su piel le hacia sentir bien, libre.
—Nabi—