24/03/2018, 14:49
—Yo voy a por el arquero, no hay tiempo, Mogura sugiero que te quedes para apoyarla.—
El médico de pelo rojo fue rápido en tomar la iniciativa de la situación y plantear un plan de acción, plan de acción que nadie tendría tiempo a cuestionar o rehacer. Como todo lo anterior hecho en la jornada, el equipo improvisado seguiría improvisando.
Mogura tenía delante la tarea de asistir en su combate a la kunoichi, quien no paraba de luchar por su vida con una espada en mano. Sus oponentes en aquel momento eran dos hombres armados con alabardas, no parecían muy interesados en cerrar distancia con Aki.
Y eso le daba una idea al médico.
Llevaría rápidamente una mano al interior de su portaobjetos y tomaría un pequeño frasco de cristal. Agudizó un poco su ojo para ver un lugar adecuado y entonces, sin dudarlo dos veces, arrojaría el Gas Lacrimogéno. El objetivo era un punto entre los dos hombres armados con las naginata y un poco detrás, de manera que cuando el gas se liberase fuese demasiado tarde para que estos pudiesen reaccionar.
El médico de pelo rojo fue rápido en tomar la iniciativa de la situación y plantear un plan de acción, plan de acción que nadie tendría tiempo a cuestionar o rehacer. Como todo lo anterior hecho en la jornada, el equipo improvisado seguiría improvisando.
Mogura tenía delante la tarea de asistir en su combate a la kunoichi, quien no paraba de luchar por su vida con una espada en mano. Sus oponentes en aquel momento eran dos hombres armados con alabardas, no parecían muy interesados en cerrar distancia con Aki.
Y eso le daba una idea al médico.
Llevaría rápidamente una mano al interior de su portaobjetos y tomaría un pequeño frasco de cristal. Agudizó un poco su ojo para ver un lugar adecuado y entonces, sin dudarlo dos veces, arrojaría el Gas Lacrimogéno. El objetivo era un punto entre los dos hombres armados con las naginata y un poco detrás, de manera que cuando el gas se liberase fuese demasiado tarde para que estos pudiesen reaccionar.
Hablo - Pienso