10/04/2018, 21:04
Estaba ella tan concentrada en su lectura que no se percató de que en aquella calle la verdad es que no pasaba mucha gente, es más; la tienda a la que había acudido parecía estar en el barrio más tranquilo de casi toda Yamiria.
Por eso no se esperó que un chico, moreno y de aproximadamente su estatura, de repente y sin previo aviso acabase con la cabeza besando al suelo.
Primeramente se sobresaltó, claro que tras haberse inmerso en la lectura no se esperaba salir de ella tras el sonido de alguien comiéndose el suelo, y luego hizo lo que esperaba que todo el mundo hiciese en aquellos momentos. Y no, no era reírse del desconocido hasta que te revolcases en el suelo de la risa.
—¿Estás bien? —preguntó apresurándose a tenderle una mano al herido, la verdad es que normalmente en esos casos aunque era típico preguntar eso, también era verdad que nadie se cae por gusto, así que obviamente, el chico no estaría bien.
Claro que tampoco sabía qué decir en aquel caso, y no quería ser brusca o incluso irrespetuosa.
Por eso no se esperó que un chico, moreno y de aproximadamente su estatura, de repente y sin previo aviso acabase con la cabeza besando al suelo.
Primeramente se sobresaltó, claro que tras haberse inmerso en la lectura no se esperaba salir de ella tras el sonido de alguien comiéndose el suelo, y luego hizo lo que esperaba que todo el mundo hiciese en aquellos momentos. Y no, no era reírse del desconocido hasta que te revolcases en el suelo de la risa.
—¿Estás bien? —preguntó apresurándose a tenderle una mano al herido, la verdad es que normalmente en esos casos aunque era típico preguntar eso, también era verdad que nadie se cae por gusto, así que obviamente, el chico no estaría bien.
Claro que tampoco sabía qué decir en aquel caso, y no quería ser brusca o incluso irrespetuosa.