11/04/2018, 03:00
Riko habló y lanzó el ultimátum a la pelirroja. Era hablar o hablar, porque sino habría un reporte con consecuencias bastante grandes y complicadas para los implicados. Aunque lo primero que se le cruzó por la cabeza al monje era el combate que seguramente iba a existir en el medio en el cual Mae se resistiría a ello. En ese caso, la vida de los gennin estarían en riesgo.
Sin embargo, el devenir de los hechos parecía resistirse un poco más y buscar otros caminos.
—Ay, dios, es que no se callan ni un segundo.— miró al cielo largando un suspiro de agobio, pero sin dejar de remar.
—Les voy a ser completamente clara, ¿Si? Vamos a callarnos todos hasta llegar al puerto de Yamiria, y vamos a dejar de hablar. No voy a responder más preguntas y me van a tener que creer, y se van a tener que callar. ¿Por qué?— se inclinó hacía delante para acercar su cara a la de los shinobi.
—Porque yo tengo órdenes de matarlos a ambos aquí mismo, y no lo estoy haciendo. Así que por tan inmenso favor, porque está claro que no tienen ni un poquito de chance contra mí, espero que se callen de acá hasta que lleguemos al puerto y no hablen del tema nunca más.
No me importa si me creen o no, si tienen dudas o no. Quiero silencio, ¿Entendido?
El calvo se quedó en su asiento sin saber que responder, mirando con dudas a la remera, quién ya estaba con la mirada seria fija en el horizonte. Por lo que se veía, todavía no había mostrado ni un ápice de posible cansancio ante el trabajo de moverlos a los tres. ¿Atacar sería una solución? Tal vez ese curso de acción tuviera sentido tras un tiempo de viaje, cuando estuviese cansada si es que en algún momento alcanzase ese estado.
«¿A Yamiria? ¿Dijo el puerto de Yamiria?»
Sin embargo, el devenir de los hechos parecía resistirse un poco más y buscar otros caminos.
—Ay, dios, es que no se callan ni un segundo.— miró al cielo largando un suspiro de agobio, pero sin dejar de remar.
—Les voy a ser completamente clara, ¿Si? Vamos a callarnos todos hasta llegar al puerto de Yamiria, y vamos a dejar de hablar. No voy a responder más preguntas y me van a tener que creer, y se van a tener que callar. ¿Por qué?— se inclinó hacía delante para acercar su cara a la de los shinobi.
—Porque yo tengo órdenes de matarlos a ambos aquí mismo, y no lo estoy haciendo. Así que por tan inmenso favor, porque está claro que no tienen ni un poquito de chance contra mí, espero que se callen de acá hasta que lleguemos al puerto y no hablen del tema nunca más.
No me importa si me creen o no, si tienen dudas o no. Quiero silencio, ¿Entendido?
El calvo se quedó en su asiento sin saber que responder, mirando con dudas a la remera, quién ya estaba con la mirada seria fija en el horizonte. Por lo que se veía, todavía no había mostrado ni un ápice de posible cansancio ante el trabajo de moverlos a los tres. ¿Atacar sería una solución? Tal vez ese curso de acción tuviera sentido tras un tiempo de viaje, cuando estuviese cansada si es que en algún momento alcanzase ese estado.
«¿A Yamiria? ¿Dijo el puerto de Yamiria?»
"El miedo es el camino al lado oscuro. El miedo lleva a la ira, la ira al odio, el odio al sufrimiento, y el sufrimiento al lado oscuro"
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘