24/04/2018, 21:13
(Última modificación: 24/04/2018, 21:13 por Uzumaki Eri.)
Daruu aseguró que lo que le iba a enseñar era una técnica que la dejaría totalmente maravillada, y ella pensó por un momento en todas aquellas técnicas que no conocía, claro que fue un poco estúpido, ya que si se ponía a imaginar todas aquellas que no había visto nunca podían salir disparates, así que, ilusionada, asintió enérgicamente ante aquello.
—¡Qué guay! —exclamó, entusiasmada —. No, no, yo empiezo primero, así mis expectativas están intactas, porque, ¿y si tu técnica mola más que la mía?
De un pequeño salito se dio la vuelta y se alejó tanto del moreno como de las rocas, luego eligió una de las que había allí y la señaló, indicando a su acompañante que esa sería la que recibiría el golpe directo. Respiró hondo, ya que sería su segunda o tercera vez haciendo el Chidori totalmente aprendido, y soltó el aire lentamente.
Miró a la roca, como si fuese un auténtico enemigo y...
... Con un suave movimiento de brazo, de su mano izquierda emergió una cantidad de chakra eléctrico el cual logró hacerse visible y empezó a chirriar cual mil pájaros alrededor. Conocía la técnica, conocía sus pros y sus contras, y cuando sujetó su brazo izquierdo con el derecho para lograr mayor precisión, comenzó a correr lo más rápido que pudo, y gracias a aquello Daruu pudo ver lo que parecía un centella de luz.
Impactando brutalmente contra una roca.
En efecto, la roca se hizo pedazos tras recibir el cruel golpe que había recibido por obra de la kunoichi del Remolino. Eri permaneció unos segundos con la mano alzada, hasta que los efectos de la técnica se disipasen por completo. Una vez logrado, Daruu vería como la muchacha jadeaba ligeramente y se recomponía tomando y soltando aire rápidamente.
—¿Qué tal... he estado?
—¡Qué guay! —exclamó, entusiasmada —. No, no, yo empiezo primero, así mis expectativas están intactas, porque, ¿y si tu técnica mola más que la mía?
De un pequeño salito se dio la vuelta y se alejó tanto del moreno como de las rocas, luego eligió una de las que había allí y la señaló, indicando a su acompañante que esa sería la que recibiría el golpe directo. Respiró hondo, ya que sería su segunda o tercera vez haciendo el Chidori totalmente aprendido, y soltó el aire lentamente.
Miró a la roca, como si fuese un auténtico enemigo y...
... Con un suave movimiento de brazo, de su mano izquierda emergió una cantidad de chakra eléctrico el cual logró hacerse visible y empezó a chirriar cual mil pájaros alrededor. Conocía la técnica, conocía sus pros y sus contras, y cuando sujetó su brazo izquierdo con el derecho para lograr mayor precisión, comenzó a correr lo más rápido que pudo, y gracias a aquello Daruu pudo ver lo que parecía un centella de luz.
Impactando brutalmente contra una roca.
En efecto, la roca se hizo pedazos tras recibir el cruel golpe que había recibido por obra de la kunoichi del Remolino. Eri permaneció unos segundos con la mano alzada, hasta que los efectos de la técnica se disipasen por completo. Una vez logrado, Daruu vería como la muchacha jadeaba ligeramente y se recomponía tomando y soltando aire rápidamente.
—¿Qué tal... he estado?