15/05/2018, 02:07
Al cabo de unos cuantos minutos de caminata, los genin lograron abrirse paso a través de bosque sin perder una pierna, lo que era decir mucho teniendo en cuenta que a veces les costaba horrores ver en dónde mierda pisaban. Para la sorpresa de ambos, sin embargo, resultó que afuera hacía vida un inmenso prado que contaba con un puñado de edificaciones, casonas y pequeños almacenes cuyas condiciones eran variopintas entre unas y las otras. Las había en mejor estado, desde luego, pero desde la distancia, y no siendo los únicos equipos que morirían por encontrar un refugio tan agradable; era previsible que algún enemigo se encontrase ya en el corazón de la pequeña ciudad.
El maldito quid de la cuestión era saber en cuál.
—Por deber, pues creo que debemos. No sobreviviremos a la noche quedándonos afuera, y yo me estoy congelando. Ahora —entrecerró los ojos, e intentó ubicarse en una de las casas. Cualquiera—. si podemos asegurarnos de alguna manera que al menos una esté desocupada, sería bárbaro. ¿Pero cómo? yo aún no he aprendido a mantener a un Kage bunshin en el tiempo, por lo que no podríamos enviar nada a recabar información. Y los mizu bunshin no cumplen con esa función, así que estamos un tanto jodidos.
El maldito quid de la cuestión era saber en cuál.
—Por deber, pues creo que debemos. No sobreviviremos a la noche quedándonos afuera, y yo me estoy congelando. Ahora —entrecerró los ojos, e intentó ubicarse en una de las casas. Cualquiera—. si podemos asegurarnos de alguna manera que al menos una esté desocupada, sería bárbaro. ¿Pero cómo? yo aún no he aprendido a mantener a un Kage bunshin en el tiempo, por lo que no podríamos enviar nada a recabar información. Y los mizu bunshin no cumplen con esa función, así que estamos un tanto jodidos.