15/05/2018, 18:16
Akame chasqueó la lengua; por supuesto que no iba a ser tan fácil. ¿O sí? «Un apretón de manos... Sólo necesitamos un apretón de manos...» Pensativo, trató de idear la mejor estrategia de acercamiento. Datsue aseguraba que sólo tenía que hacer un sello —el del Kage Bunshin— y luego tocar a Masaru para poder sellar el destino de éste... Cosa que Akame encontró realmente interesante. «¿Así que necesitas hacer los sellos de la técnica que vas a imbuir en el Fuuin?» El Uchiha sonrió para sus adentros.
Sea como fuere, el menor de los Hermanos del Desierto sugirió que repitiesen la jugada que tan fácilmente les había permitido someter a un poderoso enemigo en el pasado. Akame negó con la cabeza.
—¿Y si no conseguimos quedarnos a solas con él? Imagínate que activo mi Sharingan ahí dentro, rodeado de algunas de las personas más supersticiosas de Oonindo... Nada bueno podría salir de ahí —argumentó, decidido. Mas levantó el índice derecho y continuó hablando—. Sin embargo, si conseguimos aislarlo...
El Uchiha cayó entonces en la cuenta de algo.
—Tienen un huerto. Debe ser la hora de comer... Ahora estarán todos juntos, pero quizás más tarde cada uno vuelva a sus tareas. Podríamos intentar atraer al objetivo al huerto cuando no haya nadie allí. ¿Tal vez, usando el Henge no Jutsu para transformarnos en uno de los otros monjes?
»Le llevas a la parte de atrás del santuario, una vez allí yo le pillo con el Saimingan y luego le sellas el Kage Bunshin.
Sea como fuere, el menor de los Hermanos del Desierto sugirió que repitiesen la jugada que tan fácilmente les había permitido someter a un poderoso enemigo en el pasado. Akame negó con la cabeza.
—¿Y si no conseguimos quedarnos a solas con él? Imagínate que activo mi Sharingan ahí dentro, rodeado de algunas de las personas más supersticiosas de Oonindo... Nada bueno podría salir de ahí —argumentó, decidido. Mas levantó el índice derecho y continuó hablando—. Sin embargo, si conseguimos aislarlo...
El Uchiha cayó entonces en la cuenta de algo.
—Tienen un huerto. Debe ser la hora de comer... Ahora estarán todos juntos, pero quizás más tarde cada uno vuelva a sus tareas. Podríamos intentar atraer al objetivo al huerto cuando no haya nadie allí. ¿Tal vez, usando el Henge no Jutsu para transformarnos en uno de los otros monjes?
»Le llevas a la parte de atrás del santuario, una vez allí yo le pillo con el Saimingan y luego le sellas el Kage Bunshin.