2/09/2015, 00:15
Los pocos rayos del Sol que se lograban ver tras la leve dispersión de niebla volvieron a desaparecer. Karamaru ya se encontraba bajo los árboles de ese pequeño bosque que se encontraba en la llanura cuando escucho una lluvia fuerte. Como era habitual en la zona, el diluvio comenzó de nuevo y las nubes taparon el cielo para hacer el famoso clima de las Llanuras de la Tempestad Eterna. El calvo apenas había escuchado las últimas palabras del sabio antes de alejarse por completo
«"Empiecen", como si necesitáramos que nos de un comienzo. En cuanto se propone el desafío se empieza, así de fácil» pensaba Karamaru mientras trataba de deducir para donde había ido el animal.
Lo había visto meterse entre los árboles y esa era su posición actual, pero aunque estaba en la última posición conocida del mono, no sabía para donde había ido. Varios segundos de adrenalina le siguieron a ese momento, pero Karamaru se dio cuenta que no iba a poder hacer nada en ese estado.
Tomo un gran respiro, y comenzó a pensar. Pensaba en como un cazador rastreaba a una presa. ¿Olfato? Karamaru no tenía uno muy bueno ¿Vista? Tampoco ¿Gusto? Menos ¿Oído? La lluvia tapaba los ruidos leves del mono ¿Tacto? Menos que menos.
«Vamos, vamos, piensa, piensa» se repetía a si mismo mientras daba vueltas. Tal vez no había pasado siquiera un minuto desde que había perdido al mono, pero la había pasado mal. No le gustaba no poder encontrar las cosas, aunque eso no durara mucho.
El caer de una rama sobre su cabeza distrajo un momento a Karamaru, pero le dio la respuesta a su problema. Si un mono corre por los árboles, es propenso a que sus ramas se rompan e incluso más si es que están mojadas. Todavía no sabía para donde ir, había varias ramas rotas por el lugar, pero por lo menos había deducido algo. Él seguía parado en lugar, dando vueltas mientras pensaba para donde ir y para donde iría el mono.
«"Empiecen", como si necesitáramos que nos de un comienzo. En cuanto se propone el desafío se empieza, así de fácil» pensaba Karamaru mientras trataba de deducir para donde había ido el animal.
Lo había visto meterse entre los árboles y esa era su posición actual, pero aunque estaba en la última posición conocida del mono, no sabía para donde había ido. Varios segundos de adrenalina le siguieron a ese momento, pero Karamaru se dio cuenta que no iba a poder hacer nada en ese estado.
Tomo un gran respiro, y comenzó a pensar. Pensaba en como un cazador rastreaba a una presa. ¿Olfato? Karamaru no tenía uno muy bueno ¿Vista? Tampoco ¿Gusto? Menos ¿Oído? La lluvia tapaba los ruidos leves del mono ¿Tacto? Menos que menos.
«Vamos, vamos, piensa, piensa» se repetía a si mismo mientras daba vueltas. Tal vez no había pasado siquiera un minuto desde que había perdido al mono, pero la había pasado mal. No le gustaba no poder encontrar las cosas, aunque eso no durara mucho.
El caer de una rama sobre su cabeza distrajo un momento a Karamaru, pero le dio la respuesta a su problema. Si un mono corre por los árboles, es propenso a que sus ramas se rompan e incluso más si es que están mojadas. Todavía no sabía para donde ir, había varias ramas rotas por el lugar, pero por lo menos había deducido algo. Él seguía parado en lugar, dando vueltas mientras pensaba para donde ir y para donde iría el mono.
"El miedo es el camino al lado oscuro. El miedo lleva a la ira, la ira al odio, el odio al sufrimiento, y el sufrimiento al lado oscuro"
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘