25/05/2018, 17:40
Ante la afirmación de buscar algún recoveco por donde colarse, ambos shinobi comenzaron a andar por los alrededores del gran castillo que se alzaba junto a ellos. La Uzumaki no podía estar más maravillada, pues aquel majestuoso lugar se asimilaba a los mismísimos lugares donde vivían los señores feudales, ¿quién sabía? A lo mejor ahí había vivido alguien muy importante, ¿un rey? ¿Habría reyes muy antiguos?
La pelirroja caminaba por delante de Reiji, buscando por todos los lugares que podía, aunque para su desgracia no parecía haber ningún hueco roto, ninguna ventana abierta o algún agujero por el que colarse. Tan concentrados parecían ir que ninguno se percató de que el suelo comenzó a ceder bajo sí mismos, y tras crujidos ambos cayeron a lo desconocido.
—¡AAH! —exclamó ella mientras caía, sin esperarse aquello.
Pareció caer sobre piedra, algo duro, ya que lo sintió con sus propias carnes. Comenzó a toser levemente por la humareda de polvo que se había levantado, y hasta que no se disipó, no pudo ver sus alrededores. Parecía como un pequeño calabozo, con barrotes chirriantes, paredes de piedra y todo muy oscuro...
—¿Estas bien?
—Sí... —murmuró, sobándose la espalda —. ¿Y tú? —preguntó ella, a lo mejor Reiji no había conseguido caer bien.
—Parece que estamos dentro, aunque no se ve nada de nada. Y no tengo antorchar ni nada para iluminar…
Aunque tras ello parecía confirmarse que sí que estaba bien.
—Yo no sé hacer fuego... —confesó ella, mientras se incorporaba lentamente del suelo —. Busquemos por aquí cerca, o, a las malas, podemos volver a subir a la superficie a coger alguna rama o algo.
La pelirroja caminaba por delante de Reiji, buscando por todos los lugares que podía, aunque para su desgracia no parecía haber ningún hueco roto, ninguna ventana abierta o algún agujero por el que colarse. Tan concentrados parecían ir que ninguno se percató de que el suelo comenzó a ceder bajo sí mismos, y tras crujidos ambos cayeron a lo desconocido.
—¡AAH! —exclamó ella mientras caía, sin esperarse aquello.
Pareció caer sobre piedra, algo duro, ya que lo sintió con sus propias carnes. Comenzó a toser levemente por la humareda de polvo que se había levantado, y hasta que no se disipó, no pudo ver sus alrededores. Parecía como un pequeño calabozo, con barrotes chirriantes, paredes de piedra y todo muy oscuro...
—¿Estas bien?
—Sí... —murmuró, sobándose la espalda —. ¿Y tú? —preguntó ella, a lo mejor Reiji no había conseguido caer bien.
—Parece que estamos dentro, aunque no se ve nada de nada. Y no tengo antorchar ni nada para iluminar…
Aunque tras ello parecía confirmarse que sí que estaba bien.
—Yo no sé hacer fuego... —confesó ella, mientras se incorporaba lentamente del suelo —. Busquemos por aquí cerca, o, a las malas, podemos volver a subir a la superficie a coger alguna rama o algo.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)