30/05/2018, 20:25
Datsue trató de mover la cama lo más silenciosamente que fue capaz; poco. La madera fue arrastrada sobre la madera, emitiendo un crujido seco y prolongado. Al mirar en el hueco que formaba la cama con la pared, el Uchiha halló...
Una espada. En su vaina. Parecía sucia y desde luego no tenía nada de especial, la empuñadura estaba forrada de tiras de cuero y la guarda era una placa de hierro gris oscuro. La vaina tampoco parecía tener ningún distintivo ni ornamenta, simplemente era eso, una vaina para mantener la hoja de la espada a salvo de golpes, polvo y demás elementos que pudiesen deteriorarla.
Tampoco había nada más junto al arma, aunque Datsue sí pudo apreciar a simple vista que su longitud era más corta que la de las katanas que solían llevar guerreros y soldados. Parecía, más bien, un ninjatō; pero aparte de eso no había mucho más que destacar.
En el pasillo, fuera de la habitación, se pudo escuchar un ruido.
Una espada. En su vaina. Parecía sucia y desde luego no tenía nada de especial, la empuñadura estaba forrada de tiras de cuero y la guarda era una placa de hierro gris oscuro. La vaina tampoco parecía tener ningún distintivo ni ornamenta, simplemente era eso, una vaina para mantener la hoja de la espada a salvo de golpes, polvo y demás elementos que pudiesen deteriorarla.
Tampoco había nada más junto al arma, aunque Datsue sí pudo apreciar a simple vista que su longitud era más corta que la de las katanas que solían llevar guerreros y soldados. Parecía, más bien, un ninjatō; pero aparte de eso no había mucho más que destacar.
En el pasillo, fuera de la habitación, se pudo escuchar un ruido.