1/06/2018, 16:37
—Bueno... Me apetecería uno de hielo. ¿Todavía venderán los que se parten en dos? Nunca he compartido ninguno.
— Claro, a ver si nos encontramos algún puesto de camino.
No tardamos en encontrarnos de nuevo con las calles infestadas de puestos ambulantes vendiendo todo tipo de comida o ofreciendo algún juego para conseguir peluches. Paso un buen rato antes de que encontrásemos uno que vendiese helados. Me acerqué un momento, soltando la mano de Eri, para coger el helado y pagar al hombre que los vendía.
Al volver donde me esperaba la kunoichi partí el helado y le ofrecí su mitad. Después me pareció raro volver a cogerle la mano, así que esperé a ver qué quería hacer ella.
— Aquí tienes, ¿quieres que nos sentemos o seguimos de camino a tu casa?
— Claro, a ver si nos encontramos algún puesto de camino.
No tardamos en encontrarnos de nuevo con las calles infestadas de puestos ambulantes vendiendo todo tipo de comida o ofreciendo algún juego para conseguir peluches. Paso un buen rato antes de que encontrásemos uno que vendiese helados. Me acerqué un momento, soltando la mano de Eri, para coger el helado y pagar al hombre que los vendía.
Al volver donde me esperaba la kunoichi partí el helado y le ofrecí su mitad. Después me pareció raro volver a cogerle la mano, así que esperé a ver qué quería hacer ella.
— Aquí tienes, ¿quieres que nos sentemos o seguimos de camino a tu casa?
—Nabi—