21/06/2018, 00:11
(Última modificación: 21/06/2018, 01:25 por Amedama Daruu.)
Sin embargo, su rival no pensaba detenerse a charlar. Formulando un simple sello del Tigre, el pelirrojo había creado una copia de agua surgida del enorme resultado del choque de los dos Mizurappa al comienzo de la batalla. Avanzaban ambos hacia él, el clon con un kunai en mano, el original formulando una ristra de sellos.
«¡Trama algo! ¡Mierda, es muy rápido!»
Daruu intentaba seguir con los ojos a dos Keisuke que se volvieron un borrón y recortaron la posición que les separaba en apenas un instante. El muchacho formuló el sello del Tigre y apartó la cabeza justo a tiempo para que el kunai no le arañara el rostro. Un par de mechones de su cabello flotaron un instante en el aire que le pareció a cámara lenta: el instante en el que vio el brazo del Keisuke real echándosele encima.
«Bien hecho, Keisuke.»
La esfera de agua le envolvió sin remedio mientras sonreía. Pronto sintió la presión. Keisuke esperaba finalizar el combate haciéndole ahogarse.
Daruu, lentamente, hizo todo el esfuerzo que pudo y consiguió mover el brazo y los dedos de una mano. Levantó un pulgar en símbolo de aprobación.
Le mostró los dientes, sonriente. Vio a su propio Mizu Bunshin, detrás de su compañero.
Y entonces, Keisuke sintió la esfera acuática que le golpeó en la espalda.
«¡Trama algo! ¡Mierda, es muy rápido!»
Daruu intentaba seguir con los ojos a dos Keisuke que se volvieron un borrón y recortaron la posición que les separaba en apenas un instante. El muchacho formuló el sello del Tigre y apartó la cabeza justo a tiempo para que el kunai no le arañara el rostro. Un par de mechones de su cabello flotaron un instante en el aire que le pareció a cámara lenta: el instante en el que vio el brazo del Keisuke real echándosele encima.
«Bien hecho, Keisuke.»
La esfera de agua le envolvió sin remedio mientras sonreía. Pronto sintió la presión. Keisuke esperaba finalizar el combate haciéndole ahogarse.
Daruu, lentamente, hizo todo el esfuerzo que pudo y consiguió mover el brazo y los dedos de una mano. Levantó un pulgar en símbolo de aprobación.
Le mostró los dientes, sonriente. Vio a su propio Mizu Bunshin, detrás de su compañero.
Y entonces, Keisuke sintió la esfera acuática que le golpeó en la espalda.