30/06/2018, 19:13
Akame chasqueó la lengua con visible molestia cuando el amejin le rebatió fácilmente sus pobres argumentos; a las palabras de Karamaru había poco que decir, sin embargo, porque la evidente diferencia de rangos entre ambos lo hacía todo mucho más difícil para el Uchiha. Así pues, el jōnin se mantuvo en silencio durante unos momentos, con los brazos cruzados.
Parecía estar debatiéndose si debía entrenar o no a aquella mujer... Pero no, no era eso lo que estaba pensando.
Pō se cuadró en el sitio, como si así pudiera parecer más apta, o dispuesta, para el entrenamiento.
—¡Jōnin-sensei! ¡Le prometo que trabajaré muy duro, no le decepcionaré! —exclamó, con los ojos cargados de confianza—. Si hay que tener un propósito para ser ninja, yo le aseguro que el mío... Me llena de determinación.
No hacía falta ser clarividente para ver que Pō no mentía. Estaba realmente decidida a convertirse en una kunoichi y la pérdida de su familia la espoleaba, como a un caballo de carreras, a galopar sin descanso hacia aquella noble meta.
—Karamaru-san —dijo finalmente Akame, todavía con los brazos cruzados y la vista hacia el suelo—. ¿Nos darías un poco de privacidad? —entonces, el jōnin miró hacia la puerta de la habitación.
Parecía estar debatiéndose si debía entrenar o no a aquella mujer... Pero no, no era eso lo que estaba pensando.
Pō se cuadró en el sitio, como si así pudiera parecer más apta, o dispuesta, para el entrenamiento.
—¡Jōnin-sensei! ¡Le prometo que trabajaré muy duro, no le decepcionaré! —exclamó, con los ojos cargados de confianza—. Si hay que tener un propósito para ser ninja, yo le aseguro que el mío... Me llena de determinación.
No hacía falta ser clarividente para ver que Pō no mentía. Estaba realmente decidida a convertirse en una kunoichi y la pérdida de su familia la espoleaba, como a un caballo de carreras, a galopar sin descanso hacia aquella noble meta.
—Karamaru-san —dijo finalmente Akame, todavía con los brazos cruzados y la vista hacia el suelo—. ¿Nos darías un poco de privacidad? —entonces, el jōnin miró hacia la puerta de la habitación.