3/07/2018, 13:55
A Karma le parecía razonable que la señora le echara un vistazo al libro antes de aceptar el cambio. Lo que la kunoichi no esperaba es que fuese a comprobarlo de arriba a abajo. Página por página. A su velocidad de fórmula uno con nitro.
Aquello sí que se hizo eterno, no solo en la mente de la muchacha, si no en el mundo real. Trató de distraerse, lanzando miradas ausentes a distintos rincones de la tienda, escudriñando libros y mangas desde la lejanía. Pero aquello no era suficiente para hacer la titánica espera más llevadera.
Quedó mirando a un punto no concreto tras la dueña, al infinito, enfrascada en sus pensamientos. Podría haberse quedado durmiendo de pie. Se tapó la boca en un par de ocasiones, cuando necesitó bostezar, por educación. Aquello era un auténtico ejercicio de resistencia.
—Todo… en… orden… Espero… verte… pronto… de… nuevo… —Karma retornó a la realidad a trompicones—. Muchas… gracias.
—G-Gracias a usted... —expresó, distraída.
Se hizo con Flor de Primavera y lo introdujo en la bolsa, tomando el puesto que antes había sido de El Ninja Sabio. Acto seguido abandonó la librería, poniendo rumbo hacia la casa de los Yoshikawa, donde podría pensar en su siguiente movimiento.
Aquello sí que se hizo eterno, no solo en la mente de la muchacha, si no en el mundo real. Trató de distraerse, lanzando miradas ausentes a distintos rincones de la tienda, escudriñando libros y mangas desde la lejanía. Pero aquello no era suficiente para hacer la titánica espera más llevadera.
Quedó mirando a un punto no concreto tras la dueña, al infinito, enfrascada en sus pensamientos. Podría haberse quedado durmiendo de pie. Se tapó la boca en un par de ocasiones, cuando necesitó bostezar, por educación. Aquello era un auténtico ejercicio de resistencia.
—Todo… en… orden… Espero… verte… pronto… de… nuevo… —Karma retornó a la realidad a trompicones—. Muchas… gracias.
—G-Gracias a usted... —expresó, distraída.
Se hizo con Flor de Primavera y lo introdujo en la bolsa, tomando el puesto que antes había sido de El Ninja Sabio. Acto seguido abandonó la librería, poniendo rumbo hacia la casa de los Yoshikawa, donde podría pensar en su siguiente movimiento.