9/07/2018, 20:12
—¿No habrá cámaras dentro de sus ojos, no?
—Si, lo he pensado alguna vez, pero jamás he tenido la oportunidad de acercarme a comprobarlo, y si de verdad tienen cámaras de vigilancia, lo cual es bastante probable, estoy seguro de que tiraran al que se acerque a ellas desde lo mas alto del edificio de la Arashikage. Y yo de momento no se volar.
Si, por mucho tiempo que pasase con mis cuervos, y por muy bueno que fuese mi cerebro, el ser humano tenia sus limitaciones y una de ellas era no tener alas. Cierto es que, con mi ingenio, seguro podía fabricarme unas de metal, o desarrollar algún ninjutsu de viento para volar, sin embargo… Si la Arashikage decidía lanzarte desde lo mas alto de la torra, y sobrevivías, encontraría alguna otra forma de terminar contigo. Era mejor no enfadarla.
Volviendo al lugar y a la compañía en ese momento…
—¿Crees en el destino?¿Crees que el destino puede odiar a una persona?— Yo no debería de ser el tipo de persona que creyese en los dioses o en cosas tan aleatorias como el Karma o el destino, sin embargo… —Últimamente parece que algún dios me haya mirado con su ojo malo, he viajado de sitio a sitio en busca de algún misterio sin resolver, a ruináis antiguas en busca de conocimiento del pasado, y todo lo que he encontrado ha sido nada. Por lo menos tú has sido simpática conmigo… la gente de Kusagakure…
—Si, lo he pensado alguna vez, pero jamás he tenido la oportunidad de acercarme a comprobarlo, y si de verdad tienen cámaras de vigilancia, lo cual es bastante probable, estoy seguro de que tiraran al que se acerque a ellas desde lo mas alto del edificio de la Arashikage. Y yo de momento no se volar.
Si, por mucho tiempo que pasase con mis cuervos, y por muy bueno que fuese mi cerebro, el ser humano tenia sus limitaciones y una de ellas era no tener alas. Cierto es que, con mi ingenio, seguro podía fabricarme unas de metal, o desarrollar algún ninjutsu de viento para volar, sin embargo… Si la Arashikage decidía lanzarte desde lo mas alto de la torra, y sobrevivías, encontraría alguna otra forma de terminar contigo. Era mejor no enfadarla.
Volviendo al lugar y a la compañía en ese momento…
—¿Crees en el destino?¿Crees que el destino puede odiar a una persona?— Yo no debería de ser el tipo de persona que creyese en los dioses o en cosas tan aleatorias como el Karma o el destino, sin embargo… —Últimamente parece que algún dios me haya mirado con su ojo malo, he viajado de sitio a sitio en busca de algún misterio sin resolver, a ruináis antiguas en busca de conocimiento del pasado, y todo lo que he encontrado ha sido nada. Por lo menos tú has sido simpática conmigo… la gente de Kusagakure…