17/07/2018, 18:03
Datsue se revolvió. Se revolvió como cuando Uzumaki Zoku pretendía usarles como armas de guerra. Como peones. Como meros objetos. Nunca le había gustado que le dijesen lo que tenía que hacer. Pero aquella mujer tenía un algo, un no sé qué, que te obligaba a escuchar cada una de sus palabras como si la vida te fuese en ello.
Mejor darle una victoria.
Tomó la taza y se la llevó a los labios. Y bebió. O, al menos, hizo que bebía de ella. Porque todo el mundo sabe que Uchiha Datsue es el mayor tramposo que Oonindo ha visto. Tome aprovechó su momentánea bajada de guardia para lanzar una ataque sorpresa. De haber estado bebiendo de verdad, hubiese escupido el té en un vistoso chorro en cono.
«¿Qué cojones sabes tú de mí?». Apretó los puños. Le temblaban. No sabía si de rabia o miedo. Quizá de ambas. Pero Tome no solo parecía haber hecho sus deberes con él, sino con Akame. De hecho, la sospecha que había tenido tiempo atrás —en realidad hacía tan solo unos minutos— parecía confirmarse. «¿Akame…chan?»
—¿Nunca te has planteado cuánto, o mejor dicho, qué poco sabes de tu Hermano?
Cayó el silencio como la hoja de un verdugo.
—Yo… —se le había ido la voz—. Le conozco mejor que tú. —El nervio y la camaradería hablaron por él. Porque, en el fondo sabía…
Sabía que aquella mujer llevaba algo de razón. Akame siempre había sido esquivo en cuanto a su pasado. Y su padre… su padre siempre estaba de viaje cuando les coincidía pasar por Tanzaku Gai. Un hombre ocupado, se había dicho. Pero cuando Datsue preguntaba a su Hermano cómo se había enterado él de que no estaba —mandar cartas a la Villa no era la tarea más fácil del mundo—, este cambiaba rápidamente de conversación. Como aquella vez que habían saldado la marca del hierro.
Mejor darle una victoria.
Tomó la taza y se la llevó a los labios. Y bebió. O, al menos, hizo que bebía de ella. Porque todo el mundo sabe que Uchiha Datsue es el mayor tramposo que Oonindo ha visto. Tome aprovechó su momentánea bajada de guardia para lanzar una ataque sorpresa. De haber estado bebiendo de verdad, hubiese escupido el té en un vistoso chorro en cono.
«¿Qué cojones sabes tú de mí?». Apretó los puños. Le temblaban. No sabía si de rabia o miedo. Quizá de ambas. Pero Tome no solo parecía haber hecho sus deberes con él, sino con Akame. De hecho, la sospecha que había tenido tiempo atrás —en realidad hacía tan solo unos minutos— parecía confirmarse. «¿Akame…chan?»
—¿Nunca te has planteado cuánto, o mejor dicho, qué poco sabes de tu Hermano?
Cayó el silencio como la hoja de un verdugo.
—Yo… —se le había ido la voz—. Le conozco mejor que tú. —El nervio y la camaradería hablaron por él. Porque, en el fondo sabía…
Sabía que aquella mujer llevaba algo de razón. Akame siempre había sido esquivo en cuanto a su pasado. Y su padre… su padre siempre estaba de viaje cuando les coincidía pasar por Tanzaku Gai. Un hombre ocupado, se había dicho. Pero cuando Datsue preguntaba a su Hermano cómo se había enterado él de que no estaba —mandar cartas a la Villa no era la tarea más fácil del mundo—, este cambiaba rápidamente de conversación. Como aquella vez que habían saldado la marca del hierro.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado