16/09/2015, 00:17
El enfrentamiento era inminente.
Pese a que la tormenta arreciaba sobre la terraza del inmenso torreón que actuaba como academia, los dos genin se alzaban firmes a unos tres metros de la posición del otro. Ambos habían entrenado incontables veces en aquel lugar. Ambos conocían la el balcón como la palma de su mano. Pero, durante todos los años que habían estado estudiando allí, jamás habían cruzado sus armas en un combate.
El rugido de un trueno lejano marcó el pistoletazo de salida.
Sin perder un instante, Daruu dirigió la mano a su portaobjetos y, con un preciso movimiento de su brazo, un proyectil silbó en el aire directo hacia ella.
«¿Ha apuntado a mi frente?» Se preguntó, asustada. Se había agachado para esquivar el shuriken, pero no pudo reprimir el impulso de llevarse una mano hacia la bandana que cubría aquella zona suya. «Relájate. Sólo ha sido una coincidencia...» Se abofeteó mentalmente, obligándose a concentrarse de nuevo en el combate, y se lanzó hacia delante para recortar distancias.
El peor enemigo que puede tener un shinobi es el desconocimiento. Y Ayame desconocía las habilidades y la forma de combatir de su oponente. Por el momento sólo sabía que Daruu era capaz de manejar las plantas, pero cómo podría utilizarlas en un enfrentamiento directo era algo que escapaba a su comprensión. Por eso tenía que tantearle de alguna manera, tenía que presionarle...
Juntó las manos a la altura del pecho, y las sus dedos se entrelazaron ágilmente en una corta secuencia de gestos manuales. Dragón. Tigre. Liebre.
—¡Suiton! —anunció, inspirando repentinamente una buena cantidad de aire que acumuló en su pecho—. ¡Mizurappa!
El aire exhalado se convirtió en un furioso torrente de agua a presión que recorrió la distancia que le separaba de su oponente, directo a impactar en su pecho.
• PV: 100
• CK: 116 (-12 CK) [+100 Gobi]
Objetos: Bomba de humo, Hilo shinobi (3 usos), Kunai, Shuriken x5
Daño recibido
Daño causado
Pese a que la tormenta arreciaba sobre la terraza del inmenso torreón que actuaba como academia, los dos genin se alzaban firmes a unos tres metros de la posición del otro. Ambos habían entrenado incontables veces en aquel lugar. Ambos conocían la el balcón como la palma de su mano. Pero, durante todos los años que habían estado estudiando allí, jamás habían cruzado sus armas en un combate.
El rugido de un trueno lejano marcó el pistoletazo de salida.
Sin perder un instante, Daruu dirigió la mano a su portaobjetos y, con un preciso movimiento de su brazo, un proyectil silbó en el aire directo hacia ella.
«¿Ha apuntado a mi frente?» Se preguntó, asustada. Se había agachado para esquivar el shuriken, pero no pudo reprimir el impulso de llevarse una mano hacia la bandana que cubría aquella zona suya. «Relájate. Sólo ha sido una coincidencia...» Se abofeteó mentalmente, obligándose a concentrarse de nuevo en el combate, y se lanzó hacia delante para recortar distancias.
El peor enemigo que puede tener un shinobi es el desconocimiento. Y Ayame desconocía las habilidades y la forma de combatir de su oponente. Por el momento sólo sabía que Daruu era capaz de manejar las plantas, pero cómo podría utilizarlas en un enfrentamiento directo era algo que escapaba a su comprensión. Por eso tenía que tantearle de alguna manera, tenía que presionarle...
Juntó las manos a la altura del pecho, y las sus dedos se entrelazaron ágilmente en una corta secuencia de gestos manuales. Dragón. Tigre. Liebre.
—¡Suiton! —anunció, inspirando repentinamente una buena cantidad de aire que acumuló en su pecho—. ¡Mizurappa!
El aire exhalado se convirtió en un furioso torrente de agua a presión que recorrió la distancia que le separaba de su oponente, directo a impactar en su pecho.
Estado de Ayame
• PV: 100
• CK: 116 (-12 CK) [+100 Gobi]
Objetos: Bomba de humo, Hilo shinobi (3 usos), Kunai, Shuriken x5
Daño recibido