10/09/2018, 13:45
Chokichi esbozó una sonrisa nerviosa mientras tiraba del cuello de su chaleco para dejar pasar el aire. Yota parecía ser un hueso duro de roer, y él empezaba a quedarse sin muchas ideas. Improvisar bajo presión no solía ser su punto fuerte.
Anko interrumpió sus pensamientos. Primero, trayendo el pedido de Akame, quien salió a esperarles al exterior. Luego, trayendo el suyo propio. Se relamió los labios, hambriento, al ver la bandeja de cartón repleta de dangos. La tomó con cuidado y salió a la calle, mientras le hincaba el diente a una bolita con uno de esos "E-mocchi-conos" dibujados en ella.
Estaba riquísimo. Su rostro dio fe de ello. En el siguiente bocado se llevó dos bolitas. En el siguiente tres. Casi se atraganta cuando Akame, de golpe y porrazo, le pregunta cómo ascendió a chuunin. Se puso rojo como un tomate y tuvo que darse varios golpes en el pecho hasta que por fin tragó.
—L-lo siento —se disculpó. Siempre se disculpaba por todo.
¿Cómo era que le habían ascendido a chuunin? Oh, había muchas razones. Una de ellas podría haber sido su vital papel en la caída de Zoku. Decían que los Hermanos del Desierto lo habían tumbado, pero había sido él, y solo él, quien realmente había propiciado su muerte. Desde el momento en que había visto el cadáver de Yakisoba. Desde el momento en que lo había fotografiado y enviado a Hanabi.
Él era el héroe entre las sombras.
Pero lo había hecho anónimamente, temiendo posibles represalias por parte de Zoku si la rebelión salía mal. Y, por ello, nadie se lo reconocía. Las cosas tenían que cambiar. Lo harían, con la revista que tenía en mente.
—Fue en una misión de infiltración —respondió, finalmente—. No puedo entrar en detalles —miró de reojo a Yota—, pero el jounin con el que iba quedó inhabilitado y tuve que sustituirle en el momento. La verdad, no sé ni cómo salí vivo de allí. Un golpe de fortuna —reconoció—. Y les gustó tanto mi actuación que me ascendieron.
Anko interrumpió sus pensamientos. Primero, trayendo el pedido de Akame, quien salió a esperarles al exterior. Luego, trayendo el suyo propio. Se relamió los labios, hambriento, al ver la bandeja de cartón repleta de dangos. La tomó con cuidado y salió a la calle, mientras le hincaba el diente a una bolita con uno de esos "E-mocchi-conos" dibujados en ella.
Estaba riquísimo. Su rostro dio fe de ello. En el siguiente bocado se llevó dos bolitas. En el siguiente tres. Casi se atraganta cuando Akame, de golpe y porrazo, le pregunta cómo ascendió a chuunin. Se puso rojo como un tomate y tuvo que darse varios golpes en el pecho hasta que por fin tragó.
—L-lo siento —se disculpó. Siempre se disculpaba por todo.
¿Cómo era que le habían ascendido a chuunin? Oh, había muchas razones. Una de ellas podría haber sido su vital papel en la caída de Zoku. Decían que los Hermanos del Desierto lo habían tumbado, pero había sido él, y solo él, quien realmente había propiciado su muerte. Desde el momento en que había visto el cadáver de Yakisoba. Desde el momento en que lo había fotografiado y enviado a Hanabi.
Él era el héroe entre las sombras.
Pero lo había hecho anónimamente, temiendo posibles represalias por parte de Zoku si la rebelión salía mal. Y, por ello, nadie se lo reconocía. Las cosas tenían que cambiar. Lo harían, con la revista que tenía en mente.
—Fue en una misión de infiltración —respondió, finalmente—. No puedo entrar en detalles —miró de reojo a Yota—, pero el jounin con el que iba quedó inhabilitado y tuve que sustituirle en el momento. La verdad, no sé ni cómo salí vivo de allí. Un golpe de fortuna —reconoció—. Y les gustó tanto mi actuación que me ascendieron.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado