17/09/2018, 01:34
—Pues procura satisfacerla con alguien de tu propia aldea. O después, cualquiera de tus congéneres puede sugerir a conveniencia que te has dejado sugestionar por un amejin, y eso te va a traer muchísimos problemas.
Riko asintió, aquella iba a ser la primera y última vez que preguntara al respecto de lo ocurrido el los exámenes Chunin, al menos a alguien que no fuera de su propia aldea.
Los siguientes segundos fueron, por decirlo de alguna manera, raros. El amejin le sonrió y no precisamente una sonris amable, tal y como su mirada dejaba entrever y, sin saber muy bien por qué, se empezó a sentir incómodo, como si hubiera pasado a ser un pequeño pececillo en un mar lleno de tiburones.
—Y... ¿has venido sólo, Riko-san?
Miró a los ojos al amenio, dubitativo.
—S-Sí. — Se limitó a responder, con cada fibra de su cuerpo tensa, como si esperara que el chico le atacara de un momento a otro.
«Quizás debería empezar a desconfiar más de la gente...» Se reprimió a si mismo
Riko asintió, aquella iba a ser la primera y última vez que preguntara al respecto de lo ocurrido el los exámenes Chunin, al menos a alguien que no fuera de su propia aldea.
Los siguientes segundos fueron, por decirlo de alguna manera, raros. El amejin le sonrió y no precisamente una sonris amable, tal y como su mirada dejaba entrever y, sin saber muy bien por qué, se empezó a sentir incómodo, como si hubiera pasado a ser un pequeño pececillo en un mar lleno de tiburones.
—Y... ¿has venido sólo, Riko-san?
Miró a los ojos al amenio, dubitativo.
—S-Sí. — Se limitó a responder, con cada fibra de su cuerpo tensa, como si esperara que el chico le atacara de un momento a otro.
«Quizás debería empezar a desconfiar más de la gente...» Se reprimió a si mismo
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»