18/09/2018, 00:45
Y cuando la cabeza le dejó de dar vueltas...
Riko escuchó algo. No sabía qué exactamente, pues era un sonido gutural que parecía camuflarse con el azote del viento. Tampoco le era sencillo discernir de dónde provenía —si es que realmente provenía de algún lado en particular— porque todo estaba muy oscuro. El sol ya se había ocultado tras la cabeza de Shiomaru.
Entonces, nuevamente se hizo el silencio. Razón tenían aquellos pueblerinos que decían que el Valle del Fin era un lugar plácido de día, pero que de noche, se convertía en un lugar bastante tétrico.
Riko escuchó algo. No sabía qué exactamente, pues era un sonido gutural que parecía camuflarse con el azote del viento. Tampoco le era sencillo discernir de dónde provenía —si es que realmente provenía de algún lado en particular— porque todo estaba muy oscuro. El sol ya se había ocultado tras la cabeza de Shiomaru.
Entonces, nuevamente se hizo el silencio. Razón tenían aquellos pueblerinos que decían que el Valle del Fin era un lugar plácido de día, pero que de noche, se convertía en un lugar bastante tétrico.