21/09/2018, 18:44
Su padre asintió, y comenzó a entrelazar las manos en la secuencia de sellos que terminaría de arropar a Ayame en una nueva ilusión.
—Muy bien. Entonces, podemos comenzar. Hoy te trataré de enseñar la lección más importante que aprendí en mi carrera como ninja —habló, y tras una última palmada su cuerpo se desvaneció en el aire como si no hubiera estado compuesto más que de un espeso humo azul marino. Él ya no estaba allí, aunque Ayame sabía que sí, pero su voz retumbó en el agua y en la plataforma que la sostenía—: Que los sentimientos... nos hacen débiles.
Ayame dio un pequeño respingo, y miró a su alrededor, buscándole. Pero era inútil, su voz sonaba desde todas partes y ninguna a la vez.
—¡No! ¡Eso no es cierto, papá! —Se atrevió a rebatirle, y las palabras de Daruu, dichas tiempo atrás en un barco de camino a Amegakure, volaron a través de sus labios—. ¡Hay que controlarlos para que los demás no puedan aprovecharse de ellos, pero no nos vuelven débiles! ¡Son estos sentimientos los que nos impulsan a proteger a la gente a la que queremos!
Se negaba en redondo. No iba a adquirir un dogma que no compartía con él. ¡De ninguna manera!
—Muy bien. Entonces, podemos comenzar. Hoy te trataré de enseñar la lección más importante que aprendí en mi carrera como ninja —habló, y tras una última palmada su cuerpo se desvaneció en el aire como si no hubiera estado compuesto más que de un espeso humo azul marino. Él ya no estaba allí, aunque Ayame sabía que sí, pero su voz retumbó en el agua y en la plataforma que la sostenía—: Que los sentimientos... nos hacen débiles.
Ayame dio un pequeño respingo, y miró a su alrededor, buscándole. Pero era inútil, su voz sonaba desde todas partes y ninguna a la vez.
—¡No! ¡Eso no es cierto, papá! —Se atrevió a rebatirle, y las palabras de Daruu, dichas tiempo atrás en un barco de camino a Amegakure, volaron a través de sus labios—. ¡Hay que controlarlos para que los demás no puedan aprovecharse de ellos, pero no nos vuelven débiles! ¡Son estos sentimientos los que nos impulsan a proteger a la gente a la que queremos!
Se negaba en redondo. No iba a adquirir un dogma que no compartía con él. ¡De ninguna manera!