9/10/2018, 03:45
—Vale. Primero que nada, déjate un bunshin en la celda. Está atardeciendo y con tanto árbol poco se va a notar que no tiene sombra, al menos hasta que mi padre vuelva. Eso nos dará un poco de tiempo —advirtió, alejándose de la celda y mirando a su retaguardia, para vigilar los moros—. venga, no tenemos todo el día. Pon el señuelo y sígueme.
Acto seguido, echó a andar.
Acto seguido, echó a andar.