La liberación de un alma atormentada

[Inuzuka Nabi]

Juro empezó con su mierda de la mierda, haciéndose la victima, como siempre. Le dejé a hablar sin inmutarme, ¿para qué? Estaba preparando mi discurso mentalmente, se iba a cagar el tontolculo este.

Una vez había acabado con su victimismo barato, empezó a justificar su actuación de mierda en el examen de Chunin. Con un par de huevos. Total, que la cosa estaba muy negra, por suerte, yo tenía el temple que les faltaba al resto de shinobis de mi generación.

— Ahora, sacate tu ego del culo y piensa en lo que vi YO, que estaba en primera linea. — me eché hacia delante y si hubiera tenido mangas, me las hubiera arremangado. — Estoy tranquilamente viendo un estúpido combate de examen de Chunnin. El caraculo de Uchiha Datsue con la puta loca de Aotsuki Ayame. Él, como siempre, hace gala de sus dotes para sacar de quicio a la gente y, sorpresa, lo consigue. Ayame saca su monstruo y tira una puta bomba atomica bijuual. ¿Sabes lo que pensé yo en ese momento? ¿Pensé en la mierda de Kusagakure? ¿Pensé en la escoria de Amegakure? ¿Empecé a gritar TRAICION TRAICION, AMEGAKURE TRAIDORA? No, Juro, no.

No estaba diciendo lo que le hubiese querido decir, quería mandarle a la mierda, decirle que su puta villa había jodido a mi villa sin motivo ninguno. Pero me estaba yendo por las ramas.

— Fui a por Eri, ¿y sabes qué? Ella se tiró tras Ayame, para salvarle el culo. ¿Ves? Esa es la diferencia. Datsue detuvo la bomba, un jounin y Eri se lanzan sin dudar a salvar a un jinchuriki de Amegakure descontrolado. ¡Tres ninjas de Uzushiogakure se jugaron la vida por un jinchuriki de Amegakure! ¿Y qué hicisteis vosotros? ¿Qué hizo la pacifica Kusagakure y la orgullosa Amegakure?

Ahí estaba yendo más al grano. Miraba fijamente a Juro, si hubiese tenido el carisma de Datsue, ahora mismo el kuseño estaría enarbolando la bandera de Uzushiogakure dispuesto a traicionar a su villa.

— Te voy a contar lo primero que hizo Amegakure, su segunda al mando se lanzó a por el cuello de nuestro participante, katana en mano. ¡Bravo! Pero espera, que ahora hablemos de lo primero que hizo Kusagakure. Una vez ha tenido que intervenir nuestro kage para que no muriese nadie, aparece un tio random de Kusagakure y ataca a Datsue por la espalda. Después otro le ataca por delante y por último un tercero me pega a mi. Pero, eh, que el bueno de Juro no hizo mucho más que seguir al rebaño, Shiona-sama te bendiga, Juro, por no hacer nada.

Me volví a echar hacia atrás apoyandome contra el borde de la piscina.

— Es tu villa, Juro, responsabilizate.