16/10/2018, 23:08
Kiroe tomó aire y suspiró, curvando la sonrisa en una sonrisa muy tenue.
—Una vez más, tengo que pronunciar estas palabras. La lección que le di a Daruu-kun —dijo—. La lección que aprendí cuando mi marido me traicionó y me vi obligada a...
»Ayame, los días habrían pasado, y cuando hubiera aceptado que ya ha pasado y que sí o sí voy a tener que vivir con las consecuencias, sufriría bastante menos que imaginando situaciones imposibles que ya no iban a ser.
Le puso la mano en el cabello y se lo revolvió, con cuidado de no desajustarle el gorro.
»Igual que harías bien tú centrándote en que todo está bien y ha salido bien. Y el idiota de tu padre.
—¡Cuida esa lengua, o...!
—Respecto a Daruu, le envié a por fresas shiroshimo insistiéndole en que reabriría la pastelería aún estando ciega. Con el proveedor de vacaciones, fue... bastante entretenido para él. El tiempo suficiente.
—Una vez más, tengo que pronunciar estas palabras. La lección que le di a Daruu-kun —dijo—. La lección que aprendí cuando mi marido me traicionó y me vi obligada a...
»Ayame, los días habrían pasado, y cuando hubiera aceptado que ya ha pasado y que sí o sí voy a tener que vivir con las consecuencias, sufriría bastante menos que imaginando situaciones imposibles que ya no iban a ser.
Le puso la mano en el cabello y se lo revolvió, con cuidado de no desajustarle el gorro.
»Igual que harías bien tú centrándote en que todo está bien y ha salido bien. Y el idiota de tu padre.
—¡Cuida esa lengua, o...!
—Respecto a Daruu, le envié a por fresas shiroshimo insistiéndole en que reabriría la pastelería aún estando ciega. Con el proveedor de vacaciones, fue... bastante entretenido para él. El tiempo suficiente.