27/10/2018, 00:05
Juro se preparó para una respuesta contundente. Había agachado la cabeza, y eso en idioma de perros era como mostrar sumisión, o que era menor que el otro. Juro no sentía ni lo uno ni lo otro, pero la verguenza de sus actos había acabado por hacerle caer, como un peso demasiado grande para él.
Sin embargo, las palabras que recibió no fueron hirientes. Por eso, pilló a Juro con las defensas bajas.
— Tranquilo, Juro. Te perdono.
Juro pestañeó varias veces, sin acabar de creerlo.
« ¿Qué? » — Era la misma persona que le había lanzado una mierda de perro hacía unos días, ¿verdad? ¿Le habían cambiado por otro? ¿Quizá era un impostor? ¿Le habían abducido y habían experimentado con él?
Juro se quedó esperando algo como "era broma" o "maldito kusajin". Pero en lugar de eso, solo recibió sinceridad. De verdad le perdonaba. El marionetista se quedó pasmado, sin saber que decir.
— G-gracias.... — murmuró, sorprendido por el corazón (a veces pequeño, a veces grande) de Nabi.
Entonces, el chico empezó a explicarle como probablemente lo tendría más dificil con Datsue o con Eri. Él no conocía a Datsue (aún) y dudaba que fuera a tener que disculparse con él (a veces el destino era gracioso). Pero con Eri era otra historia. Juro pudo ver que Nabi estaba realmente preocupado.
— Ni siquiera estoy seguro de que yo vaya a arreglarlo con Eri, así que...
— Lo siento, parte de eso es mi culpa — murmuró Juro, arrepentido. Aunque había que admitir que el lanzar la mierda también había acelerado el asunto —. Pero Eri no parece una persona rencorosa. La verdad es que yo también quiero hacer las paces con ella por todo lo que sucedió, y por mis palabras.
» Creo que los dos nos dejamos llevar un poco. Le dolió, pero estoy seguro de que será capaz de perdonarte — murmuró el joven —. Especialmente a ti, Nabi. Eres su compañero de villa. Y bueno... la vez que os vi estabais....muy juntos, la verdad. No sé si... hay algo más... ya sabes... entre vosotros...
Sin embargo, las palabras que recibió no fueron hirientes. Por eso, pilló a Juro con las defensas bajas.
— Tranquilo, Juro. Te perdono.
Juro pestañeó varias veces, sin acabar de creerlo.
« ¿Qué? » — Era la misma persona que le había lanzado una mierda de perro hacía unos días, ¿verdad? ¿Le habían cambiado por otro? ¿Quizá era un impostor? ¿Le habían abducido y habían experimentado con él?
Juro se quedó esperando algo como "era broma" o "maldito kusajin". Pero en lugar de eso, solo recibió sinceridad. De verdad le perdonaba. El marionetista se quedó pasmado, sin saber que decir.
— G-gracias.... — murmuró, sorprendido por el corazón (a veces pequeño, a veces grande) de Nabi.
Entonces, el chico empezó a explicarle como probablemente lo tendría más dificil con Datsue o con Eri. Él no conocía a Datsue (aún) y dudaba que fuera a tener que disculparse con él (a veces el destino era gracioso). Pero con Eri era otra historia. Juro pudo ver que Nabi estaba realmente preocupado.
— Ni siquiera estoy seguro de que yo vaya a arreglarlo con Eri, así que...
— Lo siento, parte de eso es mi culpa — murmuró Juro, arrepentido. Aunque había que admitir que el lanzar la mierda también había acelerado el asunto —. Pero Eri no parece una persona rencorosa. La verdad es que yo también quiero hacer las paces con ella por todo lo que sucedió, y por mis palabras.
» Creo que los dos nos dejamos llevar un poco. Le dolió, pero estoy seguro de que será capaz de perdonarte — murmuró el joven —. Especialmente a ti, Nabi. Eres su compañero de villa. Y bueno... la vez que os vi estabais....muy juntos, la verdad. No sé si... hay algo más... ya sabes... entre vosotros...
Hablo / Pienso
Avatar hecho por la increible Eri-sama.
...
Sellos implantados: Hermandad intrepida
- Juro y Datsue : Aliento nevado, 218. Poder:60