27/10/2018, 23:16
Vale, Riko tenía voz propia. Más pronto que tarde, le hizo saber a Hauru que su plan no era del todo fiable. Que prevalecía primero el bienestar de ellos dos por sobre el bien común. Claro que él, Riko, no era un Roehuesos.
¿Cómo iba a sentir lo mismo que él?
Hauru escupió al suelo. O a los huesos. Era difícil saberlo.
—Osea, que pretendes que abandone a mi familia. ¿Y luego qué? ¿así les pago, luego de haberme protegido durante todos estos años? ¡¿así les pago, por conseguirme un Tótem, por conseguirte; para no ser víctima de la maldición cada que pierda los estribos?! —algo en él empezó a cambiar. Porque comenzó a cabalgar la ira, y ésta a consumirle de tal forma que ciertos rasgos de su cuerpo fueron cambiando. Los colmillos le crecieron más de lo normal, algunos huesos parecían tan tensos que Riko creyó que se le iban a atrofiar. Su respiración agitada, cabalgando a paso acelerado—. no tienes ni idea de lo que es estar maldito. Ni tú, ni nadie. Así que entiende una cosa, no te liberé para dejarte huir. Lo hice porque solo tú puedes acabar con esta pesadilla, pues el creador de este sello es un Kaguya. Necesito que me digas todos los secretos de tu clan, tus fortalezas y debilidades. Y luego iré yo a matar a ese hijo de puta yo mismo.
¿Cómo iba a sentir lo mismo que él?
Hauru escupió al suelo. O a los huesos. Era difícil saberlo.
—Osea, que pretendes que abandone a mi familia. ¿Y luego qué? ¿así les pago, luego de haberme protegido durante todos estos años? ¡¿así les pago, por conseguirme un Tótem, por conseguirte; para no ser víctima de la maldición cada que pierda los estribos?! —algo en él empezó a cambiar. Porque comenzó a cabalgar la ira, y ésta a consumirle de tal forma que ciertos rasgos de su cuerpo fueron cambiando. Los colmillos le crecieron más de lo normal, algunos huesos parecían tan tensos que Riko creyó que se le iban a atrofiar. Su respiración agitada, cabalgando a paso acelerado—. no tienes ni idea de lo que es estar maldito. Ni tú, ni nadie. Así que entiende una cosa, no te liberé para dejarte huir. Lo hice porque solo tú puedes acabar con esta pesadilla, pues el creador de este sello es un Kaguya. Necesito que me digas todos los secretos de tu clan, tus fortalezas y debilidades. Y luego iré yo a matar a ese hijo de puta yo mismo.